¿Cómo mantener altas las defensas del organismo?
La barrera inmune del organismo depende de varios factores que van más allá de la alimentación.
Por Daniela González.
Un sistema inmunológico fuerte es el resultado de un estilo de vida saludable en todos los sentidos, “no se mejora de un día para otro”. Así lo ha señalado la presidenta del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas Nutricionistas, Alma Palau, quien repasa los elementos principales para mantener altas las defensas del organismo, como por ejemplo la buena hidratación o el estado de ánimo.
Las principales recomendaciones de la experta se basan en una buena planificación de las comidas, consumo de alimentos frescos y actividad física para mantenernos activos. Evitar los procesados se convierte en otra de las medidas estrella porque “la calidad de los nutrientes es mayor en los alimentos naturales”, señala Palau. En este sentido, es conveniente señalar que la calidad de los alimentos es tan importante como las cantidades que se ingieren de cada uno de ellos.
Comidas naturales
Los alimentos que desempeñan el rol más importante son las frutas, las verduras frescas y las legumbres, sin olvidar la parte proteica que puedan aportar el pescado, la carne o los huevos. “Debemos intentar que no sean procesados, ni ultraprocesados, ni precocinados”, destaca. Los alimentos precocinados como las pizzas, lasañas o canelones, y la comida rápida no están recomendados debido a su alta densidad energética, su alto contenido en grasas y azucares. Asimismo no es recomendable el consumo de alcohol o bebidas azucaradas.
En momentos de menor movilidad física, como puede ser en la actualidad el confinamiento debido al Covid-19, los cereales se convierten el factor necesario respecto a la aportación de fibra. Situaciones con menor movilidad favorecen el estreñimiento o los problemas digestivos, por lo que Palau recomienda la ingesta de mucha fruta y verdura, así como grandes cantidades de agua.
Además, la experta ha señalado la importancia de las “sustancias bioactivas”, aquellas que activan “nuestra vida interna”, como pueden contener las frutas, las verduras, los frutos secos o los aceites, entre otros. En esta línea, consumir frutos secos y semillas son una buena opción siempre y cuando no sean fritos, endulzados o salados. Por otra parte, debemos mantener una dieta alta en fitoquimicos, compuestos químicos presentes de manera natural en los alimentos vegetales que tienen un alto nivel antioxidante.
Complementos nutricionales
Algunos de los síntomas que puedan indicar la necesidad de la suplementación son: las uñas quebradizas, signos físicos de la piel, encías enrrojecidas o llagas en la boca, entre otros. En este sentido, Palau recomienda la valoración de un experto en cualquiera de los casos: “cuando se determine qué tipo de déficit existe, se elaborará la prescripción correspondiente”. En el caso de las personas vegetarianas o veganas, la suplementación de la vitamina b12 se permite sin necesidad de acudir a un profesional. Esta indicación es una pauta establecida de forma general cuando se eliminan los alimentos de procedencia animal de la dieta.
Más allá de la alimentación
La alimentación es un factor clave para reforzar la barrera inmune del organismo, aunque existen otros elementos que juegan un papel importante en las defensas de nuestro cuerpo. “Un buen descanso” se convierte en otro factor clave para mejorar la barrera inmune de nuestro organismo, ya que el estrés y la falta de sueño puede disminuir las defensas. Por otra parte, tener una buena hidratación es muy importante. En este sentido Palau señala que debemos beber agua “durante las comidas para favorecer la digestión y también entre comidas para mantener la hidratación celular”.
Por otra parte, no padecer obesidad o desnutrición puede preparar mejor a una persona ante un proceso infeccioso, explica Palau. Existen diferentes niveles de defensa en el organismo, en un primer lugar las barreras físicas, como el pelo o la piel, y en un segundo las internas, como el ph o las mucosas. Para que todas ellas puedan funcionar correctamente es importante mantener un estilo de vida saludable.
Pero, ¿cómo saber si nuestro sistema inmune es débil? La experta indica que es difícil saberlo más allá de signos evidentes de nuestro cuerpo. En este sentido, Palau apela al sentido común para intentar mantener el sistema inmune con las defensas altas.
Confinamiento
En la actualidad, tener un buen ánimo, disminuir el estrés y mantener la exposición al sol pueden ser clave, no sólo para mantener una barrera inmune fuerte, si no para favorecer la salud mental y física en tiempos del coronavirus. Por ello, ahora que pasamos más tiempo en casa, la planificación de las comidas se convierte en “fundamental” para no picotear y saber qué introducimos cada día en nuestra dieta, así como una buena organización de las actividades que realizamos.