La dieta es un factor muy importante en la vida de cualquier persona. Según el Instituto Internacional de Investigación del Cáncer, solo un 5% de los cánceres tienen una explicación genética. Sin embargo, el porcentaje restante está creado por factores externos y ambientales, en los que la alimentación, juega un factor determinante.
No consumir alcohol en grandes cantintadades, prescindir del tabaco, llevar una vida sana, equilibrada y practicar deporte son fundamentales para gozar de buena salud. Y en la prevención del cáncer (que no en la cura) hay ciertos alimentos que es muy importante incorporar a la dieta, para que esta tenga todos los nutrientes y vitaminas necesarios.
La fruta, la verdura, la fibra, las legumbres... los alimentos que consumimos día a día pueden ayudar a que nuestro sistema inmunitario esté más fuerte. Las grasas procesadas son una de las principales preocupaciones de los organismos que estudian el cáncer, ya que en los últimos años, se ha visto que las carnes procesadas, los embutidos y las bebidas ingeridas a más de 65 grados podrían tener una relación con la aparición de tumores.
Hay cuatro grandes grupos de anticancerígenos presentes en la alimentación y estos son, la fibra, las vitaminas C, E, D y A, minerales como pueden ser el calcio, derivados del azufre, zinc o magnesio y otros inhibidores de tumores como los ácidos grasos omega 3 (presentes en el pescado azul) o los fenoles. La sencillez de estos alimentos reside en que están al alcance de todos, a precios económicos y no son exclusivos. Son productos de consumo diario que pueden ayudar a evitar el cáncer. Claramente no se trata de superalimentos, aunque eso sí, al no ser exóticos ni difíciles de encontrar su consumo es mucho más fácil de incorporar a la dieta.
Por ello, hemos creado una galería con los 12 alimentos que tienes que incorporar a tu dieta para que esta sea rica en nutrientes y vitaminas con el objetivo de gozar de una alimentación saludable y prevenir, en la medida de los posible, la aparición del cáncer.
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Verduras
Una dieta rica en verduras es imprescindible ya que están llenos de componentes anticáncer (vitaminas, minerales, fibra..).
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Fibra
Una dieta alta en fibra protege frente al cáncer de colon. Comer pan es muy bueno, pero huye de los productos refinados ya que alteran los balances de grasa en el cuerpo que uamentan los factores hormonales que pueden producir cáncer.
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Alcohol
Además de estar cargado de calorías vacías, las dosis excesivas de alcohol aumentan las posibilidades de sufrir cáncer de esófago, laringe, estómago... Las bebidas destiladas son las más nocivas, sin embargo, el vino o la cerveza no tanto.
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Alimentos frescos
Hay que evitar, en la mayor medida posible, los alimentos preparados. Los alimentos frescos deben ser la parte principal de la dieta.
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La cocción
La forma en que cocinamos los alimentos también influye. Es muy importante evitar los alimentos quemados, refritos y, en general, la grasa quemada. Las barbacoas y las cocciones en las que el fuego está en contacto directo con el alimento no son recomendables.
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Setas
Las setas contienen lentinano y polisacáridos que ayudan a estimular el funcionameinto del sistema inmunitario, por lo que son muy recomendables.
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Carne roja
Se recomineda no consumir carne roja más de dos veces a la semana. Si quieres aportar proteínas a tu dieta, incluye pavo o pollo pero eso sí, de origen ecológico que incluye menos químicos.
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Legumbres
Las legumbres son una base de proteína vegetal muy recomendable. Es beneficioso tomarlas, al menos, tres veces por semana.
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Té verde
El té verde tiene una antioxidante llamado epigalocatequina que combate los radicales libres.
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Pescado
El pescado azul tiene grasas buenas, el famoso omega 3 que previene la inflamación que se relaciona con los tumores cancerosos.
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Frutos secos
Consumir de manera diaria una ración de frutos secos reduce en aproximadamente un 11% la probabilidad de contraer cáncer. La mejor opción son los crudos, sin sal ni azúcares.