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5 consejos que debes seguir para tener una piel perfecta después de la noche de Halloween

Dísfrazate, píntate y sal de fiesta en la noche de Halloween pero después sigue estos pasos para dejar tu cara limpia, cuidada e hidratada. Evitar que tu piel sufra es el principal objetivo.

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La noche más terrorífica del año se acerca, y con ella llega la hora de sacar nuestro lado más sorprendente. Y aunque posiblemente, nuestro maquillaje nunca llegue a superar al de la indiscutible reina de Halloween Heidi Klum, desmaquillarse correctamente en esta noche es algo que debemos cumplir a rajatabla. El momento previo a aplicar la pintura también es muy importante. Apunta qué recomendaciones debes seguir a la hora de desmaquillarte para que tu piel luzca perfecta al día siguiente.

La Asociación para el Autocuidado de la Salud ofrece una serie de recomendaciones para que el maquillaje de Halloween no se convierta en una pesadilla para la piel.

  • Utiliza siempre un maquillaje adecuado a tu tipo de piel.
  • Compra los productos de maquillaje en establecimientos de confianza.
  • Revisa siempre la fecha de caducidad de los productos de maquillaje antes de utilizarlos.
  • Antes de maquillarte, limpia e hidrata correctamente tu piel.
  • No olvides desmaquillarte antes de irte a dormir.
  • Utiliza un desmaquillante específico para la zona de los ojos.
  • Completa el cuidado de tu piel con la aplicación de una crema hidratante.
  • Si has aplicado algún tipo de maquillaje sobre el pelo, también debes retirarlo completamente antes de irte a dormir.

5 claves que te ayudarán a mimar tu tez

1. Lo primero de todo (aunque resulte algo obvio) es nunca acostarse maquillada. Seguramente que en más de una ocasión al volver de una noche de fiesta, desmaquillarte al día siguiente te ha parecido la mejor de las ideas. Pero si ya de por sí no lo es, en esta noche menos. Por eso, es fundamental que dediques unos minutos a limpiar y retirar el maquillaje antes de irte a la cama. Cuanto menos tiempo esté en contacto con nuestra piel, menos probabilidades tendremos de sufrir irritación o que nos aparezcan eccemas alérgicos.

2. Antes de aplicarte cualquier producto debes humedecer tu cara unos segundos con agua tibia. De esta manera, conseguirás abrir tus poros y arrastrar así más fácilmente los grumos y los restos de pintura adheridos a tu piel.

3. A continuación, con la cara humedecida, aplica un gel limpiador o desmaquillante. En estos casos resulta bastante útil utilizar después un agua micelar. Aplícala fundamentalmente en las zonas más sensibles como párpados, labios, orejas, etc. Su fórmula respetable con las pieles más delicadas y su capacidad para eliminar las impurezas, lo convierten en un producto de belleza indispensable.

4. Tras finalizar la limpieza, seca las áreas con cuidado, realizando pequeñas presiones con una toalla sobre la piel. ¡Queda prohibido frotar! Después aplica una crema hidratante por toda la zona. Un consejo útil es meter la crema unas horas antes en la nevera, así cuando la apliquemos estará fría y ayudará a que los vasos sanguíneos de la piel no se dilaten, nos aportará alivio, y disminuirá las pequeñas rojeces tras la limpieza. También, puedes optar por utilizar agua de rosas que te proporcionará frescor a la vez que conseguirá calmar tu piel.

5. Al día siguiente, si existen zonas de rojez o escozor, vuelve a hidratar la piel y evita nuevos maquillajes. Es importante proteger la piel con crema solar si vamos a estar expuestos al mismo. Si aparecen eccemas, lesiones con mucho picor o reacciones cutáneas, acude al médico por si hubiese aparecido algún eccema irritativo o de contacto por la pintura/productos del maquillaje.

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