Cuatro tratamientos de belleza caseros que puedes prepararte con vino

A todos nos gusta tomarnos una copa de vino de vez en cuando y ahora que estamos en cuarentena, confirmamos que aun más.. Pero… ¿y si te dijéramos que también puedes utilizar esta bebida para hacerte tratamientos beauty caseros estos días? La llamada vinoterapia es un tipo de tratamiento de belleza que se aplica para el cuidado de la piel, el bienestar y la relajación, que aúna las técnicas de los balnearios y spa con las propiedades antioxidantes de las uvas y el vino. Los tratamientos que abarca la vinoterapia basan su filosofía en las propiedades antioxidantes de los polifenoles de la uva, unas sustancias químicas con las que se componen muchos productos cosméticos. Además, las uvas contienen vitaminas C y E, que son una de las mejores armas contra el envejecimiento de la piel, por lo que estos tratamientos caseros pueden ayudarte a mantener la piel más tersa, suave y lisa. ¿Quieres saber cuáles son? La experta Alexandra Arraez nos propone cuatro pequeños trucos caseros para estar radiante en esta cuarentena utilizando el vino. ¡No te los pierdas! 1. Mascarilla facialCombinando vino tinto con un poquito de miel conseguirás una mascarilla facial con efecto rejuvenecedor, antioxidante y anti-edad. ¿Cómo prepararla? Mezcla cuatro cucharadas de vino con dos de miel líquida. Remueve muy lentamente para que se fundan bien. Después, aplica la mascarilla sobre tu cara describiendo movimientos circulares. Déjala actuar durante unos 20 minutos y aclárala con agua tibia. Las propiedades del vino tinto, unidas a las de la miel, consiguen eliminar las células muertas, difuminan las arrugas, hidratan el cutis y suavizan las manchas de la piel.

La llamada vinoterapia es un tipo de tratamiento de belleza que se aplica para el cuidado de la piel, el bienestar y la relajación, que aúna las técnicas de los balnearios y spa con las propiedades antioxidantes de las uvas y el vino. Los tratamientos que abarca la vinoterapia basan su filosofía en las propiedades antioxidantes de los polifenoles de la uva, unas sustancias químicas con las que se componen muchos productos cosméticos. Además, las uvas contienen vitaminas C y E, que son una de las mejores armas contra el envejecimiento de la piel, por lo que estos tratamientos caseros pueden ayudarte a mantener la piel más tersa, suave y lisa. ¿Quieres saber cuáles son? La experta Alexandra Arraez nos propone cuatro pequeños trucos caseros para estar radiante en esta cuarentena utilizando el vino. ¡No te los pierdas!

Combinando vino tinto con un poquito de miel conseguirás una mascarilla facial con efecto rejuvenecedor, antioxidante y anti-edad. ¿Cómo prepararla? Mezcla cuatro cucharadas de vino con dos de miel líquida. Remueve muy lentamente para que se fundan bien. Después, aplica la mascarilla sobre tu cara describiendo movimientos circulares. Déjala actuar durante unos 20 minutos y aclárala con agua tibia. Las propiedades del vino tinto, unidas a las de la miel, consiguen eliminar las células muertas, difuminan las arrugas, hidratan el cutis y suavizan las manchas de la piel.

¿No tienes a mano acondicionador de pelo? El vino blanco puede ser el sustituto perfecto para lograr un pelo sedoso, liso y sin encrespamiento. Coge una botella de un litro, añade una copa de vino blanco y agua. Lávate el pelo con tu champú habitual y, después del aclarado, úsalo como si fuera un acondicionador. Cuando utilices el secador notarás el pelo mucho más suelto y brillante.

¿Quieres un momento de relax en estos días tan estresantes? Llena la bañera de agua caliente, añade una o dos botellas de vino y sumérgete. Relájate 30 minutos y aclara con una suave ducha. Apaga la luz, pon tu música favorita y desconecta del mundo. ¿Hay algo mejor? Tu cuerpo estará mucho más suave después...

¿Buscas iluminar tu rostro? Este tratamiento facial de tres pasos te salvará la vida. Primero mezcla un huevo y una copa de vino, batélo bien y aplica la mezcla con la piel limpia, durante 15 minutos. Después, para combatir la flacidez, utiliza media copa de vino tinto y medio yogur natural. Aplícalo durante otros 15 minutos y acláralo con agua fría. Para terminar el tratamiento, utiliza una brocha de maquillaje para aplicar el vino por todo el rostro y vuelve a dejarlo actuar durante unos 15 minutos. Después, aclara con agua fría. ¡Tendrás la cara mucho más radiante!