Nordic Walking y los beneficios de andar

Hacer ejercicio siempre es saludable y si, además, te permite disfrutar al aire libre, mejor. Hay muchos deportes que, por su intensidad y el esfuerzo que suponen, pierden adeptos. Si es tu caso, apuesta por “la marcha nórdica” o ‘Nordic Walking’ para estar en forma. Salir a andar para perder peso es una de las técnicas más conocidas, antiguas y eficaces, sin embargo, ir de paseo mientras le damos a la lengua y nos contamos los últimos “cotilleos” con las amigas, puede no ser lo más efectivo. Si te gusta andar y disfrutar de los paisajes, debes saber que el ‘Nordic Walking’ potencia estas sensaciones, sin embargo, si eres de las de “la ley del mínimo esfuerzo” y crees que esta actividad es perfecta para ello, te equivocas: requiere un ritmo rápido y un correcto trabajo de los brazos con los bastones.

Beneficios para la salud

Se puede realizar a casi cualquier edad, siempre que no padezcamos problemas de salud graves, y uno de sus principales ganchos es que no existe un lugar único donde practicarlo: puede ser en la montaña, en la playa o en asfalto. Da igual si es de día o de noche; la libertad de este ejercicio es lo que más seduce a quiénes lo practican. Cuando practicas la marcha nórdica ejercitas los músculos de las piernas, pero también la zona de los hombros, los brazos, el pecho, la espalda y los abdominales. Los bastones que se utilizan en esta actividad son un gran apoyo y, además, son los responsables de que en este ejercicio se pierda un 40% más de calorías que caminando sin ellos, ya que nos obligan a esforzarnos más. Si quieres adelgazar practicando una actividad entretenida, relajante y saludable, hazte con el material necesario y dale caña a tus piernas.