Plataformas vibratorias y electroestimulación
Sí, la gimnasia pasiva, ésa que utilizaban los astronautas desde los años 60 para estar en forma, desembarca en el salón de tu casa. Conoce sus pros y contras.

Electroestimulación
Se le denomina gimnasia pasiva, ya que sólo tienes que conectarte unos electrodos para estimular tus músculos, pero no tiene nada de "pasiva": mediante una corriente eléctrica, se provocan contracciones musculares. Es el complemento perfecto para el ejercicio físico, ya que estimula la actividad muscular y evita contracturas y lesiones. Podrás hacer múltiples repeticiones sin ningún esfuerzo y trabajarás exactamente la zona del cuerpo deseada.
Además, mejorarás la circulación sanguínea y tonificarás la piel. Te recomiendan combinarlo con otros tipos de deportes aeróbicos y con una dieta sana.
Nuestros favoritos
Te recomendamos los electroestimuladores de Compex: un aparato con cuatro vías de salida de la corriente con electrodos que se pueden colocar en distintas partes del cuerpo. Tiene programas de bodybuiding, musculación y relax.
Plataformas vibratorias
Aseguran que en tan sólo 10 minutos al día consigues realizar una actividad deportiva más que aceptable. Además de trabajar tus músculos aumentarás tu locomoción, mejorarás la circulación y la piel. Es muy recomendable para combatir la celulitis.
Hay que saber colocarse adecuadamente, mantener la postura y seguir las instrucciones que nos den al pie de la letra. Al apoyar una parte del cuerpo sobre la plataforma vibratoria, sus movimientos se transmiten a todo el cuerpo. Es decir, si apoyamos un pie, la vibración se extenderá a la pierna, la cadera y la columna vertebral, generando beneficios en todos ellos.
Nuestros favoritos
Power Plate, Body Coach y Compex Winplate