
15 sencillos trucos para adelgazar sin pasar hambre
¿Quieres perder unos kilos pero sin morir de hambre? Atenta a estas pautas y consejos que te damos para disfrutar de la comida sin engordar.
No te lo acabas de creer. El número que aparece en tu báscula es el reflejo de meses de comida aleatoria, ausencia de deporte y estrés. Ahora que se acerca el verano, has decidido recapacitar y volver a adoptar hábitos ultra saludables. No solo por el peso, sino para sentirte bien contigo misma. Más allá de la conciencia body positive, ha llegado la hora de proteger tu cuerpo de los excesos. Los datos acerca de la obesidad pero también de enfermedades cardiovasculares son alarmantes. A por ello. Recuerda que para adelgazar no todo vale. Algunas dietas son muy peligrosas al poner directamente en peligro tu metabolismo y organismo. Nada de Duncan, Atkins y otros monodietas que solo incluyen un alimento comido hasta la saciedad. No es un mito, solo con una dieta variada y equilibrada conseguirás resultados 10.
Algunos alimentos son famosos por contar con pocas calorías y saciar. Las manzanas con apenas 50 calorías y su composición de agua son siempre una apuesta segura. Apuesta por las hierbas, que permiten evitar absorber grasas y azúcares, las legumbres, bajas en grasas, ricas en proteínas, ácido fólico, fibray numerosas vitaminas como la B y E. Indispensables. La calidad de los alimentos también es básica, controla siempre que puedas el valor energético de cada producto así como su aporte en glúcidos. Aprender a leer las etiquetas te evitará numerosos disgustos. Algunos productos descritos como ligeros cuentan con poca grasa pero se ven compensadas con mucho azúcar (es el caso de algunos cereales). Y por supuesto, nunca dejes de hacer deporte. Es la garantía de un cuerpo en forma y una salud de hierro. Zumba y todos sus beneficios, running, natación, o incluso ejercicios en casa, puedes elegir lo que mejor te convenga. Aunque tengas poco tiempo, algunos se pueden realizar de forma muy sencilla y en casi cualquier sitio.
Además de estas reglas básicas, ten en cuenta algunos trucos para adelgazar y sobre todo evitar la desagradable sensación de privación. Menos cantidades, más tiempo dedicado a la comida y sobre todo más concentración son algunos de los tips que te ayudarán a bajar de peso en un tiempo récord…

Es el primer consejo que debes seguir para mantenerte en tu peso y no engordar. Sigue un plan de cinco comidas al día, incluyendo a la hora del almuerzo y la merienda piezas de futa o yogures desnatados para matar el gusanillo entre horas.

Te ayudarán a hacer mejor la digestión, evitando así la antiestética hinchazón, además de evitar la retención de líquidos. Pueden ser una buena opción a la hora del almuerzo o la merienda.

A la hora de comer, olvídate del plato llano tradicional. Sírvete las raciones en uno pequeño o de postre, verás como comes solo lo que tengas hambre y no te terminarás todo lo haya delate de ti solo por gula.

¿Crees que no funciona tomar dos vasos de agua cinco minutos antes de comer? Cuando te sientes a la mesa tendrás la impresión de estar saciada y acabarás antes.

¿Recuerdas lo que siempre te decía tu madre sobre que hay que comer despacio? Pues es otra regla básica que debes seguir. El hambre real dura entre 15 y 20 minutos.

No vas a pasar hambre eliminando los carbohidratos de tu menú (elígelos integrales, eso sí), pero sí que es un buen truco prescindir del pan en tus comidas. ¡Y no caerás en la tentación de mojarlo en salsas!

Aunque más de una vez te hemos avisado de su peligro, ya que los consumimos en mayor cantidad creyendo que no engordan tanto, sí que es verdad que su bajo contenido en grasas te ayudará a conseguir tu objetivo. ¡Pásate a los productos light!

Adiós a la bollería industrial, los dulces que te tientan o el azúcar del café. Pásate a las versiones sanas y opta por edulcorantes naturales.

Ir al supermercado con el estómago vacío solo hará que caigas en tentaciones y caprichos cargados de azúcar. Lo mejor es hacerlo sin hambre, pues solo echarás al carro lo que necesites ¡y encima ahorrarás!

Puede que después de un día duro en la oficina sea lo que menos te apetezca, pero piensa que un paseo de una hora puede hacerte quemar hasta 200 calorías. ¿Y si cambias el coche por volver andando a casa después del trabajo?

Si comer fuera de casa es para ti la peor de las tentaciones, respira, que hay solución. Mira las ensaladas en primer lugar y opta por carnes o pescados a la plancha en vez de por pastas y pizzas. ¡Lo notarás!

Hazlo lentamente, masticando cada bocado unas cuarenta veces, y conseguirás una mejor digestión al mismo tiempo que ingieres menos cantidad de comida.

No se trata de eliminarla, sino de reducirla notablemte ya que favorece la retención de líquidos.

Lo demostraron decenas de estudios, ayuda a digerir y adelgazar. Ligero y a eso de las 19h, mejor que mejor.

No se trata de buscar excusas para caer en la tentación, sino no sentirse culpable por comer un día a la semana pasta o incluso helado. Te ayudará a mantenerte a dieta el resto de la semana.