
¡Cuidado con ellos! 10 alimentos que provocan digestiones pesadas
¿Te resultan pesadas algunas digestiones? Puede que el responsable esté entre los alimentos de los que te hablamos.
¿Tienes digestiones pesadas y por lo general te encuentras mal después de comer? ¿Te duele el estómago tras una comida especial? Nuestro aparato digestivo no digiere todos los alimentos que ingerimos por igual, hay algunos que por su composición y sus características resultan menos digeribles y eso puede provocar molestias estomacales como flatulencias, dolor y pinchazos, sensación de hinchazón y pesadez. Puede que estés tomando algo que no te conviene...
Síntomas como los ardores, el dolor de estómago, los gases, el reflujo, la diarrea o el estreñimiento pueden ser reflejo de que estas tomando alimentos poco recomendables que hacen daño a tu organismo. Si bien es cierto que estas dolencias también pueden evidenciar problemas de salud más graves como úlceras, colón irritable, gastritis o alguna intolerancia alimentaria, por lo general la mayoría de las veces que se sufren digestiones pesadas, la solución es muy fácil y no se requiere acudir al médico, basta con echar un vistazo a la cesta de la compra y a la cocina.
Es más que suficiente con consumir alimentos considerados fácilmente digeribles y mejorar nuestros hábitos a la hora de comer: es fundamental masticar la comida bien para facilitar la absorción de nutrientes, comer despacio para que no entre aire en el estómago, evitar beber demasiados líquidos o darse atracones, no abusar de las bebidas con gas y saber identificar el momento en el que ya estamos saciados.
Limitar o reducir la cantidad de sal y azúcar que tomamos diariamente y aumentar la cantidad de alimentos probióticos en nuestra dieta -como los yogures o el kéfir-, que restauran la flora intestinal de forma natural, también puede tener efectos muy positivos sobre nuestra salud.
Si la digestión se te hace un mundo y te duele el estómago con frecuencia después de comer, sigue estas sencillas recomendaciones y es probable que pronto notes los resultados. Y ten cuidado de no abusar -o directamente de no consumir- estos alimentos que son más propicios a provocar digestiones pesadas. Chicles, comida picante, leche, huevos duros… estos son algunos productos que pueden estar sentándote mal. ¡Ten cuidado con ellos!

Las comidas picantes ayudan a combatir el calor, aunque pueden no sentar del todo bien a ciertas personas ya que aumentan la producción de jugos digestivos y pueden provocar irritación de las mucosas del estómago.

La coliflor contiene una sustancia denominada rafinosa que provoca los molestos gases. Además, tiene un alto contenido en fibra y en compuestos de azufre, de ahí que pueda sentar mal en algunas ocasiones.

El zumo de naranja es un alimento constituye un gran aporte de vitaminas, pero tomado en ayunas, puede provocar molestias estomacales por su contenido en azúcar. Esto también se debe a que su asimilación provoca un vaciamiento brusco de la vesícula biliar. Si se suele padecer de dolores estomacales o digestiones pesadas no es lo más recomendable a primera hora de la mañana.

Los alimentos demasiado grasos y elaborados con aceites reutilizados son muy pesados e indigestos. Además de aportar muchas calorías, liberan sustancias que irritan la mucosa gástrica. Los fritos se deben tomar siempre de manera ocasional y, a poder ser, caseros y con un aceite de calidad.

Cada vez son más las personas que presentan alguna intolerancia a la lactosa y sufren problemas estomacales al consumir lácteos. Por eso, se recomienda moderación en su consumo.

La bechamel, los rellenos de croquetas, por ejemplo, y las bases de bollería y repostería son muy indigestas, ya que la mantequilla, al cocinarla, resulta muy pesada y el organismo la asimila peor.

El café no es buen aliado de nuestra digestión, ya que la cafeína estimula la producción de ácidos en el estómago, lo que puede provocar acidez y molestias digestivas. Sobre todo si se toma en ayunas y sin ningún alimento.

Sardinillas, anchoas, caballa… en general, las conservas de pescado azul en aceite no resultan muy digestivas, ya que son grasos y el aceite en el que se conservan, también. Sobre todo, se desaconseja para personas de estómago delicado y se recomienda tomarlas durante el día y no para la cena.

La yema coagulada, como se encuentra en el huevo duro y en la tortilla, es más difícil de digerir. El huevo escalfado, pasado por agua o, incluso, frito, es menos indigesto.

Comer chicle puede producir gases debido a que muchos de ellos contienen sorbitol, un edulcorante que puede ser responsable de molestias estomacales e hinchazón de vientre. Además, al mascarlos podemos introducir aire en nuestro estómago.