Estos son los mejores alimentos para combatir el calor
Estos productos ayudan a tu cuerpo a sobrellevar las altas temperaturas.
Ya ha pasado la ola de calor -también conocida como canícula- pero las altas temperaturas continúan. Este verano en el que el termómetro está batiendo todos los récords estamos escuchando todo tipo de recomendaciones a seguir para combatir el calor de forma efectiva.
Beber agua fría de forma regular para mantener un buen nivel de hidratación, utilizar cremas de protección solar en abundancia y no practicar deporte en las horas centrales del día son solo algunas de las alertas más repetidas en estos meses. También es muy importante realizar comidas ligeras, para evitar digestiones lentas y pesadas, y mantenerse en las sombra.
Además de beber mucha agua, conviene tomar alimentos ricos en líquidos. Con el calor el cuerpo se fatiga más y el apetito y el hambre puede reducirse, pero sigue siendo esencial ingerir nutrientes y líquidos que ayuden a nuestro organismo a combatir mejor el calor. Y al contrario de lo que se suele pensar, los productos más fríos no siempre son los mejores para ello.
Cuando se toman alimentos demasiado fríos la temperatura corporal baja rápidamente, pero el cuerpo contrarresta este efecto aumentándola de nuevo, de manera que la sensación de frescor dura muy poco. Por el contrario, las comidas que aumentan la temperatura corporal estimulan la circulación sanguínea y generan una cantidad mayor de sudor, cuya evaporación sobre la piel disipa el calor corporal y nos ayuda a refrigerarnos de forma natural.
Aunque hay alimentos muy recomendables en estos meses por su alto contenido en agua: frutas como las sandías, el melón, o las frambuesas y verduras como la lechuga, el apio o el rábano, también hay otros productos que, a diferencia de lo que podría pensarse, ayudan a tu cuerpo a combatir el calor: el té y otras infusiones calientes, la guindilla, los tomates, y especias picantes como la menta son más que efectivas.
Si este verano quieres pasar mucho menos calor y hacerle la tarea de enfriarse más fácil a tu cuerpo, anota estos alimentos e incorpóralos a tu alimentación durante estos meses. Son muy fáciles de tomar y con ellos sobrellevarás las altas temperaturas mucho mejor.

Los frutos rojos como las frambuesas o las moras son ricos en antocianinas, unos compuestos solubles que tienen un importante efecto antiinflamatorio y disminuyen la presión arterial y facilitan la vasodilatación, con lo que ayudan al cuerpo a bajar su temperatura.

Las sopas y las cremas tibias son una excelente opción para el verano. Además de regular nuestra temperatura corporal, suponen una ingesta extra de líquidos.

Una infusión hecha con unas hojas secas de menta en agua fría es una opción excelente para disminuir el calor del cuerpo.

Su efecto picante se debe a la capsaicina, una sustancia que provoca una mayor sudoración. Y con el sudor, el cuerpo regula la temperatura corporal y enfría el cuerpo a través de la evaporación de agua.

Una de las bebidas más recomendables en verano es el té, en todas sus variedades. Tibio o caliente, ayudará a enfriar tu cuerpo a través de la estimulación de la circulación sanguínea y te aportará todo el agua que necesitas.

La sandía es una de las frutas más consumidas en verano por su alto contenido en agua (casi un 95%). Una opción fantástica para mantener la hidratación.

Por su riqueza en agua, fibra y antioxidantes como el licopeno, los tomates son muy recomendables en estas fechas. Por eso el gazpacho o el salmorejo triunfan tanto en verano.

El agua de coco mantiene equilibrado el nivel de electrolitos de nuestro cuerpo al contener grandes cantidades de potasio, calcio, sodio, magnesio y fósforo. Una opción refrescante e hidratante este verano.

Las espinacas son unos de los vegetales más energéticos y nutritivos. Contienen casi un 91% de agua y grandes cantidades de betacaroteno, vitaminas y minerales esenciales, por lo que además te ayudarán a conseguir un bronceado más bonito.

Entre los alimentos que debes evitar para no pasar calor se encuentran las proteínas animales como las provenientes de las carnes rojas, que además producen digestiones pesadas. También los alimentos excesivamente fríos como los helados, que sólo harán a tu cuerpo trabajar más para regular la temperatura corporal.