
Pilar Bardem: las películas más emblemáticas de la actriz que luchó por los derechos de sus compañeros
Miembro de una de las sagas familiares más reconocidas del cine español, la actriz será recordada no solo por haber trabajado con los mejores directores del país, sino también por haber reivindicado unas mejores condiciones para los trabajadores de la industria.
Pilar Bardem se crió en una familia de artistas del mundo del cine y, a pesar de conocer de primera mano la realidad, la inestabilidad y los sinsabores de la profesión, encauzó su carrera en el mismo rumbo. Tras 50 años de películas y series a sus espaldas - el último título en el que participó, Rey gitano, data de 2015 -, la actriz fallecía el pasado sábado 17 de julio a los 82 años de edad a causa de una enfermedad pulmonar, dejando tras de sí un impresionante legado cinematográfico y televisivo.
Su carrera comenzó en el cine en 1965 junto a Fernando Fernán Gómez. La película era El mundo sigue y su papel, pequeño. Tras este inicio por la puerta grande, el de Bardem se convertiría primero en un rostro habitual del cine costumbrista español, dirigida por cineastas como Pedro Masó o Pedro Lazaga. También trabajó a las órdenes de su hermano, Juan Antonio Bardem, considerado uno de los directores del 'neorrealismo español' en películas como Varietés o El puente. En esta época también tuvo la oportunidad de participar en importantes adaptaciones literarias al cine, como es el caso de La Regenta, dirigida por Gonzalo Suárez; o El libro del buen amor.
Sin embargo, su época profesional de mayor esplendor llegó en los años 90, justo cuando su hijo Javier Bardem comenzaba a coger carrerilla en la industria del cine. Es en este momento cuando la actriz comienza a encadenar intervenciones en algunas de las películas más recordadas de la década como Las edades de Lulú, Todo por la pasta, Vacas, Airbag, Carne trémula o Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto, por la que recibió el premio Goya a la Mejor actriz de reparto en 1996. O, lo que es lo mismo, tuvo la oportunidad de trabajar con muchos de los mejores y más premiados directores de cine españoles como Bigas Luna, Enrique Urbizu, Julio Medem, Juanma Bajo Ulloa, Pedro Almodóvar o Agustín Díaz Yanes.
Además de su carrera profesional en el mundo del espectáculo, si por algo va a ser recordada Pilar Bardem es por compaginar su trabajo como actriz con el activismo político. Y es que si algo ha caracterizado a esta intérprete ha sido su fuerte personalidad y su lucha por los derechos humanos, por diferentes causas sociales y por mejorar las condiciones de vida de los miembros más necesitados de la industria del cine, tal y como ha señalado Penélope Cruz, su nuera, en una emotiva carta abierta que ha publicado tras su fallecimiento. "No se puede olvidar que en nuestra profesión muchas cosas han mejorado gracias a tu grandísimo esfuerzo a lo largo de los años, sin rendirte en ningún momento. Eres admirable", ha escrito la actriz. De hecho, desde 2017, el premio que entrega la Academia de Cine de España a cineastas solidarios lleva su nombre.
Su hijo Javier Bardem le dedicó su Oscar por No es país para viejos en 2008 mientras ella sonreía y aplaudía orgullosa desde el patio de butacas. Hoy su familia y sus compañeros de profesión la recuerdan así, sonriendo, y a todos siempre nos quedarán sus películas más emblemáticas para disfrutar de su talento:

Pilar Bardem debutó a las órdenes de una de las figuras más importantes del cine español: Fernando Fernán Gómez. Este director, guionista y actor la escogió para un papel pequeño, el de Maruja, en una película que trata sobre dos hermanas que tienen una competencia poco sana entre ellas, mientras tratan de encontrar el éxito, el amor y una buena posición social en el Madrid de los años 60.

En esta película dirigida por Agustín Díaz Yanes, Pilar Bardem interpreta a Doña Julia, la suegra de la protagonista (Victoria Abril), a quien ayuda en un gran lío del que no sabe salir. Por su trabajo en este intenso y violento thriller de mujeres, Pilar Bardem ganó el Premio Goya como Mejor actriz de reparto en 1996.

Su personaje protagoniza una secuencia junto a Penélope Cruz en la que la actriz sufre un parto en la calle o, mejor dicho, en un autobús. Y precisamente una de estas escenas ha sido la elegida por la actriz para ilustrar la despedida que le ha dedicado a su suegra: "Miro esta foto y me pregunto cuál habría sido nuestra reacción si alguien nos hubiese dicho en ese momento que el destino tenía maravillosos planes para unirnos más allá del cine". Pedro Almodóvar, director de la película, fue el artífice de este "ensayo de la vida misma" y de una de las mejores secuencias de la carrera de estas dos actrices que se acabarían convirtiendo en familia.

En Airbag, Pilar Bardem es 'La Herme', la dueña del puticlub en el que el protagonista, Juantxo (Karra Elejalde), pierde su anillo de compromiso mientras celebra su despedida de soltero. Dirigida por Juanma Bajo Ulloa, esta comedia salvaje ganó dos premios Goya en 1998.

Dirigida por José Luis García Sánchez, María querida cuenta la historia de Lola (María Botto), una joven periodista que tiene que cubrir la concesión del Premio Cervantes a la escritora María Zambrano (Pilar Bardem). Aunque al principio no tiene mucho interés, Lola pronto queda cautivada por la personalidad de esta intelectual de la República, que tuvo que exiliarse tras la guerra civil. Pilar Bardem fue nominada al Goya como Mejor actriz protagonista por su trabajo en esta película.