Todo un don Juan
La larga lista de conquistas y noviazgos del rey Juan Carlos I
El emérito siempre se ha caracterizado por ser un hombre atrevido, picarón y cortés, algo que le ha hecho ir reñido con la fidelidad a su esposa doña Sofía.
No es ningún secreto que Sofía de Grecia y Borbón no ha sido la única mujer que ha ocupado el corazón de Juan Carlos I. El emérito siempre ha hecho gala de una belleza y un don para el cortejo que le han convertido en todo un conquistador. Se casó con la hermana del heredero al trono griego pero se le ha visto rodeado por otras mujeres que han puesto en jaque mate innumerables veces su relación con Sofía.
La primera mujer de la que se enamoró Juan Carlos fue María Gabriela de Saboya, hija de Humberto II, el último rey de Italia. Vivían exiliados en Estoril, ella tenía todo lo que pedía Juan Carlos en una mujer pero había algo con lo que no contó: a Francisco Franco no le gustaba nada para el hombre que había designado como su heredero como jefe del Estado. Pudieron haberse casado, pero todo saltó por los aires.
Fue doña Sofía quien consiguió llevar al altar al hijo de don Juan. Dicen que de una boda sale otra y eso es lo que pasó. Su relación terminó de despuntar en la boda de los duques de Kent en 1961 y tan solo un año después protagonizaron la suya el 14 de mayo en Roma con una triple celebración.
Era la época de oro en España, con el cabaret como espectáculo preferido de la alta sociedad y don Juan Carlos se dejaría atrapar por los encantos de las vedettes. Bárbara Rey es una de las personas con las que podría haber tenido algún affaire. Sin embargo, la polémica estalló en la década de los 90, cuando unos ladrones entraron a su casa en búsqueda de unas grabaciones que comprometían a un personaje español muy importante. Finalmente, compraron el silencio de Rey.
Otro de los romances más impactantes fue el que dicen que tuvo con Diana de Gales. La complicidad de ambos durante los viajes a Mallorca de Lady Di y el príncipe Carlos motivaron un sinfín de especulaciones en torno a que entre ellos hubo algo más que una buena acogida por parte del monarca.
Los escarceos y las aventuras dejaron paso a relaciones más serias y que pusieron en tela de juicio al monarca. Hablamos cómo no de Corinna zu Sayn-Wittgenstein que conoció a Juan Carlos en una cacería en Ciudad Real cuando todavía no se había divorciado de su marido. Se vieron durante mucho tiempo en monterías, eventos reales y hasta el año 2012, en un dúplex del complejo de lujo Domaine Rochegrise en los Alpes, que después vendió Corinna en 2013. Incluso, se dice que Juan Carlos quiso divorciarse de Sofía para casarse con la alemana. Después, una grabación pondría contra las cuerdas al Rey acusándole de usar como testaferro a la germana. ¿Le seguirá trayendo problemas?
La otra gran mujer junto a Corinna que le dio importantes quebraderos de cabeza a Juan Carlos fue Marta Gayá. Esta decoradora siempre ha sido una de sus grandes amigas en Mallorca. Se dice que perdió la cabeza por ella y eso le hizo desatender sus obligaciones como Rey y como padre de familia. Sus encuentros íntimos tenían lugar en Mallorca, en Gstaad (Suiza) o en París y fue una de las veces que el matrimonio entre Sofía y Juan Carlos más se ha tambaleado. La reina Sofía quedó muy debilitada después de las filtraciones sobre el romance de Gayá y Juan Carlos.
En el currículo sentimental del padre de Felipe VI también hay que sumar otras mujeres muy conocidas. En clave artística, Sara Montiel y Raffaella Carrá fueron relacionadas con él. Olghina de Robilant o Carmen Díez de Rivera (mujer de confianza del equipo de Adolfo Suárez) también podrían haber caído rendidas a los encantos de un rey convertido en don Juan, como su padre.

Fue la primera por la que el Rey perdió el norte. Vivían exiliados en Estoril, ella tenía todo lo que pedía Juan Carlos en una mujer pero había algo con lo que no contó: a Francisco Franco no le gustaba nada para el hombre que había designado como su heredero como jefe del Estado.

Quizás desconocida para cierto público, pero Olghina y Juan Carlos vivieron un amor durante la adolescencia. Corrían los años 50.

Su supuesto romance tuvo lugar durante la época de las vedette. La polémica estalló en la década de los 90, cuando unos ladrones entraron a su casa en búsqueda de unas grabaciones que comprometían a un personaje español muy importante. Finalmente, compraron el silencio de la artista.

Seguramente os acordáis de aquella mítica canción de "Para hacer bien el amor hay que venir al sur". No se sabe a ciencia cierta si la cantante y el Rey fueron al sur o si hicieron el amor, pero hubo muchos rumores sobre ellos.

Otro de los romances más impactantes fue el que dicen que tuvo con Diana de Gales. La complicidad de ambos durante los viajes a Mallorca de Lady Di y el príncipe Carlos motivaron un sinfín de especulaciones en torno a que entre ellos hubo algo más que una buena acogida por parte del monarca.

Sara Montiel llegó a decir que el rey Juan Carlos era la más guapa de España y se dice que doña Sofía les pilló en la cama. ¿Cuánto hubo de cierto?

Quizás la madre de todos los escándalos de Juan Carlos I. Se vieron durante mucho tiempo en monterías, eventos reales y hasta el año 2012, en un dúplex del complejo de lujo Domaine Rochegrise en los Alpes, que después vendió Corinna en 2013. Incluso, se dice que Juan Carlos quiso divorciarse de Sofía para casarse con la alemana.

La última gran amante que se le ha atribuido al monarca. Sus encuentros en Palma dieron mucho que hablar y es la vez que más se ha tambaleado el matrimonio entre los eméritos. Gstaad (Suiza) y París (Francia) fueron otros de los lugares testigos de su pasión.