
Contra viento y marea
Así han cambiado Shakira y Piqué como pareja, del romance secreto a padrazos
Los rumores de crisis no cesan, pero ellos viven felizmente en Barcelona con sus dos hijos, Milan y Sasha
Se llevan 10 años de edad, casi los mismos que han pasado desde que Shakira cantara y bailara el ‘Waka Waka’ en el Mundial de Fútbol de Sudáfrica, un campeonato en el que la selección española se alzó con la victoria y que supuso un antes y un después para uno de los futbolistas, Gerad Piqué, que quedó prendado de esa rubia que era como huracán que hacía saltar a todos de sus asientos y a él y al resto de sus compañeros danzar a un ritmo trepidante al tiempo que celebraban su éxito.
Fue entonces cuando la pareja inició un idilio que llevaron en el más absoluto de los secretos, aunque los que estaban a su alrededor lo sabían perfectamente pues ninguno era capaz de disimular sus sentimientos. Desde entonces hasta hoy ha llovido mucho, se han hecho mil especulaciones en torno a Shakira y Piqué, que si boda, que si crisis… pero su relación sentimental solo ha ido creciendo llegando a consolidarse con dos hijos, Milan y Sasha, su mayor tesoro.
Algunos apuntaban a que la diferencia de edad, Shakira acaba de cumplir 44 años y Gerad 34, ambos el 2 de febrero, haría que sus intereses de futuro no fueran los mismos y ese amor acabara en una rápida ruptura, pero se equivocaron. Lo que podría haber sido un romance pasajero se ha convertido en la creación de una familia de la que ambos están orgullosos, viviendo su vida a su manera y sin importarles el que dirán.
En un principio, los encuentros que sus compromisos profesionales les permitían estaban llenos, como es lógico, de pasión, ambos corrían a verse entusiasmados hasta que decidieron poner fin a la distancia y la admirada cantante decidió mudarse a España, deseaban estar cerca cada día, conocerse más y crear un hogar en el que acomodar un noviazgo que ya estaba consolidado y seguro en su corazón. Rompieron todos los moldes luchando por un amor en el que los dos creían con firmeza, la prueba de que tenían razón son esos dos niños que adoran, Milan, de 8 años y Sasha, de 5, con los que residen tranquilos y felices en Cataluña, el lugar obligado para Piqué al militar en las filas del Fútbol Club Barcelona.
Llevar a los niños al colegio, a practicar algunos deportes, de excursión o la playa, son las actividades que más les agradan cuando sus trabajos no les hacen viajar. En la Ciudad Condal y sus alrededores se les ve salir a comer o a cenar, a ver algún espectáculo, o a pasear tranquilamente con sus hijos o sus familiares y amigos. También les gusta ir a su casa de la Cerdanya, en el Pirineo Catalán, para relajarse y disfrutar del campo. Antes de convertirse en padres no han faltado los viajes a lugares paradisiacos como Maldivas, Hawái o Japón, ahora sus vacaciones son en familia y buscando que los pequeños lo pasen genial, más de momento estos planes están en espera, como le sucede al resto de españoles, por la pandemia de COVID-19.
Desde aquellas jornadas victoriosas del año 2000 hasta hoy, las carreras de ambos han seguido un rumbo ascendente convirtiéndoles en estrellas mundiales, Shakira como cantante y Gerad Piqué como deportista de élite, no les haría falta mucho para mantener ese estatus de celebrities, pero ellos no se conforman y compaginando su papel de padrazos, apoyándose en la adversidad o defendiendo constantemente su relación, siguen sumando proyectos a su ya exitoso currículum.

Estas son las primeras imágenes que fueron captadas de Shakira y Piqué a principios de 2011, cuando su romance había sido descubierto y la cantante viajó a Barcelona para verle.

La pareja se escapa a algún lugar paradisiaco para disfrutar plenamente de sus sentimientos, las risas, las caricias y los besos no faltaban en sus encuentros.

Cuando ya su amor estaba en boca de todo el mundo dejaron de esconderse y la cantante acompaña al futbolista a algunos eventos deportivos, posando así de radiantes demostrando que lo suyo iba en serio.

Shakira y Gerad Piqué prestaron su imagen para una campaña de UNICEF con el objetivo de recaudar fondos, la diva de la música estaba embarazada de su primer hijo, Milan.

Desde que Shakira se mudó a Barcelona para vivir con su enamorado, han asistido como invitados a diferentes eventos actuando como cualquier pareja normal, el hogar con el que soñaban ya era una realidad.

Siguen tan enamorados como el primer día y se les nota, cuando están solos o también rodeados de gente dan rienda suelta a sus sentimientos con la sinceridad más absoluta.

Estrellas internacionales, su refugio es la familia que han formado junto a sus hijos, Milan de 8 años y Sasha de 5, disfrutando juntos de su tiempo en su residencia de Barcelona.