
Siete meses sin la ‘Mamba negra’
Kobe Bryant: 42 años de una leyenda
Este domingo, el eterno 24 de Los Ángeles Lakers cumpliría 42 años
Han pasado siete meses desde que un trágico accidente de helicóptero arrebatase la vida a la leyenda del baloncesto, Kobe Bryant y a su hija mediana, Gigi, de 13 años. Aquel 26 de enero, el helicóptero en el que viajaba el alero de los Lakers, junto con su hija y siete pasajeros más, se estrellaba en las colinas de Calabasas, cerca de Los Ángeles, dejando al mundo del deporte sumido en la más profunda tristeza e incredulidad por perder a una de las mayores estrellas de la franquicia angelina de la NBA. Siete largos meses han pasado donde las reacciones, tributos y homenajes de millones de personas, famosos y deportistas no se hicieron esperar y que, a día de hoy, siguen estando a la orden en cada evento deportivo. Un homenaje que este 23 de agosto vuelve a repetirse tras el que sería el 42 cumpleaños de Kobe y en el que no ha faltado la emotiva y tradicional dedicatoria de su mujer, Vanessa Bryant, quien junto a sus otras tres hijas, Natalia, Bianka y Capri, poco a poco va tratando de superar la pérdida.
La muerte del deportista aún sigue conmoviendo al mundo y su recuerdo sigue estando muy presente, sobre todo entre sus seres queridos. Algo que, lejos de su carrera como jugador, hacen de él una figura trascendental que es y será, por siempre, eterno. Sus 81 puntos ante Toronto Raptors en 2006, sus cinco anillos con los Lakers y el oro olímpico en Pekín en 2008, quedan en la memoria de la historia del deporte y, al igual que Michael Jordan, es apreciado como un deportista que traspasó las fronteras de su propio deporte. Considerado como el más digno sucesor del 23 de los Chicago Bulls, apareció por primera vez en la NBA con apenas 18 años en 1996, sin pasar por la universidad, para jugar en Los Ángeles Lakers, su equipo durante sus 20 años en la liga y donde forjó sólidas amistades con figuras como Pau Gasol o Shaquille O’Neal, con quien vivió una historia de amor y odio. Hasta la noche anterior a su fallecimiento cuando Lebron James lo superó en la lista de máximos anotadores, Kobe Bryant era considerado como el mayor anotador de la historia de los Lakers con 33.643 puntos en toda su carrera, y en 11 temporadas, fue elegido como el mejor quinteto de la NBA. Con su personalidad dentro y fuera de la cancha, el denominado la ‘Mamba Negra’ se encargó de derribar mitos, se reinvento y llevó a la gloria a los Lakers y al Dream Team. Aunque sus logros en el mundo del deporte le llevaron a situarse en lo más alto del Olimpo de la NBA, lo cierto es que los premios de Kobe Bryant traspasaron las fronteras del baloncesto consiguiendo en 2018, el Óscar al mejor cortometraje animado por Dear Basketball, escrito, narrado y protagonizado por él mismo. Todo un ejemplo de una vida que acabó trágicamente.

Kobe Bryant era un anotador compulsivo. Sus 81 puntos ante Toronto Raptors en 2006, sus cinco anillos con los Lakers y el oro olímpico en Pekín en 2008, quedan en la memoria de la historia del deporte Fue el máximo anotador de la liga en 2006 con 2.832 puntos, y en 2007 con 2.430 puntos. En 21 partidos anotó más de 50 puntos, 10 de ellos en la temporada 2006-2007. El escolta angelino puso la rúbrica a una carrera difícil de igualar anotando 60 puntos en su despedida, el 1 de abril de 2016 contra los Jazz de Utah.

El gran día del reconocimiento a Kobe Bryant de su gran aportación al mundo del baloncesto de la NBA y en especial a su equipo de toda la vida, Los Angeles Lakers, le llegó hace tres años con la retirada de los números 8 y 24 que vistió como profesional en un gran homenaje en el Staples Center. El máximo homenaje que los Lakers le podían entregar por sus 20 años de carrera y que, tras su fallecimiento, todos los equipos de la liga decidieron seguir.

Gigi era la segunda hija de la estrella del baloncesto y junto a quien falleció el pasado 26 de enero en el trágico accidente de helicóptero. Apodad como la ‘Mambita negra’, era la heredera de la pasión y genética baloncestística de su padre, quien sabía que sería una potencial jugadora de la mejor liga del mundo.

El exdeportista, que se retiró profesionalmente de las canchas en 2016, estaba enormemente dedicado a sus seres queridos. Sus redes sociales, llenas de fotos familiares, daban muestra del amor que profesaba a sus cuatro hijas, Natalia, Gigi, Bianka y Capri, la cual nació el pasado mes de junio, y a Vanessa, la mujer que se convirtió en su compañera de vida hace ya más de dos décadas.

Durante los días y las semanas que siguieron al accidente las reacciones no se hicieron esperar. La comunidad de la NBA llevó a las redes sociales sus mensajes de pésame casi de inmediato. Jugadores, entrenadores y periodistas inundaron el mundo digital con su tristeza e incredulidad según iban llegando los detalles del accidente que acabó con la vida de la leyenda del baloncesto.

Desde que se conoció el fallecimiento de Kobe Bryant y su hija en accidente de helicóptero se ha producido un aluvión de homenajes y recuerdos al que fuera crack de la NBA con los Lakers, desde minutos de silencio en entrenamientos de clubs de varios deportes a cientos de murales y esculturas repartidos por todo el mundo en honor al alero angelino y su hija.

Kobe Bryant se retiró como una leyenda del deporte que le dio la gloria. Pero rápidamente se convirtió también en un icono de Hollywood gracias a su primer Óscar, que ganó gracias a su cortometraje animado, Dear Basketball, el cual cuenta la historia de un niño que jugaba de pequeño a encestar sus calcetines y acaba ganando la NBA y la historia de esfuerzo, dedicación y amor por el baloncesto que le lleva a conseguirlo.

El pasado 26 de enero, Kobe Bryant viajaba a un partido de su hija Gigi, de 13 años, junto a la pequeña y otros siete ocupantes cuando el helicóptero se estrelló contra una colina debido a la intensa niebla de la zona, en Calabasas, Los Ángeles.

Gianna Maria jugaba en la 'Mamba Academy', en un equipo en el que el propio Kobe Bryant era entrenador. Ambos solían acudir a los partidos de Los Angeles Lakers en el Staples Center. La pequeña era una apasionada del baloncesto y entrenaba habitualmente con su padre.

Apareció por primera vez en la NBA con apenas 18 años en 1996 para jugar en Los Ángeles Lakers, su equipo durante sus 20 años en la liga y donde forjó sólidas amistades con figuras como Shaquille O’Neal, con quien mantuvo una historia de amor y odio, o Pau Gasol, a quien consideraba como su ‘hermano’ y que tras su fallecimiento, se ha volcado en ayudar a la viuda e hijas de su compañero, hasta el punto de celebrar su 40 cumpleaños con ellas.