
Confía en un acercamiento familiar
Gloria Mohedano rompe su silencio y habla claro sobre Rocío Carrasco
“Mi hermana Rocío no estaría de acuerdo con lo que está pasando”
Hace más de una década que Rocío Carrasco tomó la decisión de apartarse de la familia Mohedano. Tras el fallecimiento de su madre, Rocío Jurado, el 1 de junio de 2006, se fue separando de todo y de todos, incluso de sus hijos, Rocío y David. Los jóvenes viven con su padre, Antonio David Flores, y si bien Rocío Flores ha manifestado en numerosas ocasiones que desea un acercamiento con su madre y ha dejado la puerta abierta a la reconciliación, no ha encontrado respuesta alguna. Cansada de la situación, Gloria Mohedano entraba en `Sálvame´ y rompía así un silencio que venía manteniendo desde hace años. La hermana de `la más grande´ comenzaba diciendo: "Es insoportable para mí el oír un día sí y otro no, que los amigos de mi sobrina Rocío, porque yo soy su tía aunque no se note por parte de ella para nada, digan que ella no habla porque no quiere hacer daño a sus hijos", así de contundente se mostró durante toda la entrevista.
"Mi Rocío Flores es una niña maravillosa, ha hecho la entrevista con un respeto hacia su madre no ha habido una mala palabra, solamente un cariño, un abrir puertas, una manera de decir aquí estoy mamá, vamos a caminar juntos, esto se acaba, el tiempo pasa. Mis niños no han hecho nada para merecer esto, te puedo prometer que no han hecho nada. Si lo han hecho, que hable mi sobrina y diga qué han hecho para que de una vez paguen la pena. Toda la vida con esta pena no se puede", explicó Gloria, quien además añadió: "Mi hermana Rocío no estaría de acuerdo con lo que está pasando".
"Me gustaría hacer una pregunta a todos. ¿Hay algo más fuerte que ignorar a sus hijos? ¿El sentir esos hijos que su madre los ignora? No hay nada en el mundo, soy madre, tengo 3 hijas y a ella también la he tenido como hija mía desde que nació", comentaba una dolida Gloria, quien añadía que toda la familia está unida y la única que ha querido apartarse es su sobrina. Pese a la situación que se está viviendo, ella sueña con que todo se arregle. "Tengo la esperanza de que se arregle, que recapacite y diga: ‘son mis hijos y esto se va a arreglar ahora mismo’. No entrevistándose con gente de prensa, aunque no creo que eso llegue a ocurrir. Tiene que coger a sus hijos y hablar con ellos", dijo Gloria Mohedano, quien hasta ahora no había querido hablar sobre el tema.

Rocío Jurado fue el nexo de unión entre su hija Rocío y el resto de los Mohedano. A su muerte, el 1 de junio, el distanciamiento fue más que evidente.

Era una estampa habitual la que se producía cada año en Chipiona cuando se sacaba a la Virgen de Regla en procesión. Toda la familia se juntaba para ver pasar la imagen de la que Rocío era tan devota. Ni siquiera faltaba Rocío Carrasco.

Se ha hablado del distanciamiento de la familia Mohedano, pero Gloria ha querido aclarar que la única que se ha separado de ellos ha sido Rocío Carrasco. El resto acude a los actos en homenaje a Rocío Jurado como el que se celebró en Cádiz, donde se la nombró hija adoptiva de la ciudad.

Fueron casi dos años de lucha contra el cáncer en los que Rocío Jurado estuvo ingresada en varias ocasiones. Una de las más prolongadas fue en el Hospital Anderson de Houston, hasta donde sus hermanos acudieron para estar a su lado, al igual que su hija Rocío y Ortega Cano. Eran tiempos familiares de unidad.

El fallecimiento de Rocío Jurado marcó un antes y un después en la vida de su hija Rocío. Tomó la decisión de volcarse en su marido, Fidel, alejándose del resto de la familia, incluso de sus retoños.

Apenas cuatro meses después del fallecimiento de Rocío Jurado, comenzaron los homenajes a la artista y uno de ellos fue la inauguración en Sevilla del auditorio que llevaba el nombre de la más grande. En aquel entonces todavía Rocío Carrasco aparecía con los Mohedano y estaban volcados en los temas de la herencia.

El último acto al que Rocío Carrasco acudió junto a la familia Mohedano fue durante la inauguración del mausoleo de Rocío Jurado en el cementerio de Chipiona. Aquel 18 de septiembre de 2007 fue la última reunión familiar en que se pudo ver a Carrasco junto a los Mohedano.