
Único e irrepetible
La gran lección de vida de Pau Donés: ''Gracias a todos, mi vida ha sido un auténtico privilegio, me voy en paz''
''Me hubiera encantado haber conocido a mis nietos, pero bueno, los conoceré igual, pero de lejos''
El cantante Pau Donés llamó a Jordi Évole a finales de mayo de 2020 para comentarle que le quedaban pocas semanas de vida y que quería realizar la que iba a ser su última entrevista. El lugar elegido fue el Valle de Arán, un bello lugar en el que ha encontrado la paz y donde vivía rodeado del cariño de sus hermanos y de su hija. Muy delgado, con poblada barba canosa, sonda en la nariz y con apenas un hilo de voz que salía de su garganta, el que fuera componente de Jarabe de Palo hizo un repaso a su vida y también hizo reflexiones sobre todo lo que le ha quedado por hacer. Con gran serenidad explicó cómo le gustaría que le recordase la gente.
El intérprete del tema `La flaca´ moría apenas dos semanas después de la entrevista, a los 53 años, a causa del cáncer de cólon que padecía y contra el que luchó durante cinco largos años en los que le dio tiempo a hacer muchas cosas, como él mismo reconocía. Él amaba la vida intensamente y por ello no entendía los que hablaban de suicidio: "Me aterroriza ver que la gente tiene miedo a vivir". Esto es lo que le sucedió a su madre, que acababa con su vida cuando Pau era apenas un niño.
Una de las primeras reflexiones que Jordi Évole le realizó a Donés fue su sorpresa al querer aparecer en un documental con un aspecto físico tan deteriorado. "Bueno, no pasa nada. Es el aspecto que tengo ahora que estoy enfermo, estoy enfermito de cáncer. No pasa nada por mostrarme así. Es mejor, así se normaliza un aspecto que poco a poco se debe normalizar. Pero estoy aquí para hablar de la vida, no de la muerte", aseguró el cantante, quien añadió: "El cáncer nos da miedo.
El miedo es terrible. Yo no lo vivo porque soy poco miedoso, pero lo veo y eso me aterroriza. No se puede tener miedo a la enfermedad, al dolor. Hay que vivir", explicó.
La elección del lugar de la entrevista, en el Valle de Arán, lo tenía claro. "Este sitio es estupendo. Acabo de grabar un disco. Estoy descansando. Tengo cáncer, me estoy muriendo y quería acabar los días conversando con alguien para intentar dar una imagen que tal vez la gente no tiene, de persona normal y corriente", ese era el objetivo de Pau Donés, mostrar que es igual a todos los mortales. Además, era consciente de que cuando viese la luz el documental, él ya no estaría. "Yo no voy a estar, pero la habremos hecho con un tío que, en este momento, está, y diciendo lo que piensa y siendo lo que es".
Uno de sus lamentos es no haber podido hacer su última gira. Tenía pensado cinco conciertos en distintos puntos del mundo como Madrid, Barcelona y Nueva York. De marcharse, esta no es la única pena, pues también le hubiese gustado conocer a sus descendientes. "Me hubiera encantado haber conocido a mis nietos, pero bueno, los conoceré igual, pero de lejos". Para finalizar su entrevista más sincera, la que ha puesto un punto y final a su vida, Pau Donés quiso dar las gracias a la vida. "Gracias a todos, mi vida ha sido un auténtico privilegio, me voy en paz". Además, mandó un mensaje muy emotivo para todos: "La vida son cuatro días y tres ya han pasado. No odies a los demás. Si algo no te interesa, pues déjalo de lado. El odio no nos conduce a nada". El documental terminaba con la canción `El sitio de mi recreo´, que el propio Pau quiso cantar sin apenas voz. Hizo el esfuerzo interpretando el tema que para él ha formado parte de su vida como ahora la suya forma parte de la nuestra.

Pau llamó a Évole, al que había conocido en 2002, para que le hiciese su última entrevista sabiendo que se moría.

Fueron muchos los mensajes que mandó Pau Donés y todos fueron de vida y no de muerte, pese a que falleció apenas dos semanas después del grabar el documental.

El que fuera componente de `Jarabe de Palo´ quiso que su última entrevista fuese en el Valle de Arán, donde tiene una casa de alta montaña, que está a la venta y todavía no se ha podido vender.

Esta casa se encuentra a la venta por 2,3 millones de euros, pero todavía no se ha encontrado comprador para este bello lugar.

Conocedor de su final, Pau lo dejó todo atado y bien atado para el día en el que ya no estuviese. Su heredera universal es su hija.

Bajo estas cuatro paredes, Pau Donés cumplió alguno de sus sueños como grabar un disco y disfrutar de la compañía de los suyos.

Donés murió en paz y aunque amaba la vida y no quería morir, pudo hacer muchas de las cosas que quiso, pues vivió intensamente hasta el final.