De la reina Letizia a Isabel II o la princesa Diana: las perlas, un clásico con el que siempre aciertan

Desde hace cientos de años, las perlas se han asociado a las mujeres de la familia real. ¿La razón? Combinan con cualquier atuendo, no importa el color o el corte, les dan ese toque 'extra' a cualquier estilismo.

Sergio E. González

10.06.2021 | 11:13

10.06.2021 | 12:21

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Según los historiadores, las perlas tienen la distinción de ser la piedra preciosa más antigua que los seres humanos hemos valorado, llevado y codiciado. Conocida como la reina de las gemas, durante milenios, las perlas fueron la piedra más importante del arte y de la religión, con un gran significado cultural en todo el mundo. Representan la pureza, la inocencia y la feminidad.

Si bien es una pieza de joyería tradicional, las perlas tienen ese poder atemporal y continúan conquistando a mujeres de todas las edades con diseños contemporáneos y en tendencia.

Símbolo de estatus, los collares de perlas son sinónimo de mujeres elegantes. Antes de que Elizabeth Taylor luciera La Peregrina e incluso antes de que se la regalaran a María I de Inglaterra, las perlas reinaban en el mundo de las gemas y la joyería. "En aquel entonces, una perla podía comprar todo un país", afirma James Gattas, propietario de James Gattas Jewelers en Memphis.

Durante el siglo XX, la popularidad de las perlas subió como la espuma para rápidamente desinflarse. Comenzó como una explosión, bajó y luego volvió a subir.

En la década de 1920, estaba de moda usar largos collares de perlas naturales o de imitación. Coco Chanel las puso de moda y a menudo se dejaba ver con varios colgando de su afilado cuello. Chanel hizo de las perlas un artículo de moda para todos los días, introduciéndolas como atuendo informal. Las perlas ya no eran exclusivas de eventos nocturnos, sino que se podían usar en cualquier momento.

Desde hace cientos de años, las perlas se han asociado a las mujeres de la familia real. ¿La razón? Combinan con cualquier atuendo, no importa el color o el corte, les dan ese toque extra a cualquier estilismo.

Charlotte White, directora de diseño de 77 Diamonds, habló con el diario Express sobre la obsesión de la monarquía con las perlas.

"Las perlas siempre han estado y estarán de moda, confesó. "Se sabe que los miembros de la realeza llevan las mismas piezas durante décadas y a lo largo de varias generaciones".

Y añadió: "El atractivo perenne de las perlas entre la realeza se debe, en parte, a su suave brillo que favorece la tez". "Son versátiles, combinándose con diferentes estilos para diferentes ocasiones".

Desde Máxima de Holanda pasando Isabel II y el joyero heredado de la reina Letizia, repasamos las piezas más destacadas y valoradas de la monarquía europea:

Isabel II

Desde muy joven, la reina Isabel II ha llevado perlas en casi todos sus eventos públicos y privados. No importa la ocasión, rara vez se ve a la reina Isabel sin su joya favorita.

Isabel Bowles-Lyon

Una cosa está clara, la fascinación de la reina Isabel II por los collares de perlas es herencia de su madre, la reina Isabel Bowles-Lyon, que no salía de palacio sin uno colgando de su cuello.

Ingrid de Dinamarca

La reina danesa fue una gran coleccionista de joyas. Tanto es así que, la reina Margarita (su hija) atesora en su joyero una de las reliquias más importantes de todos los tiempos: la Pearl Poire, una tiara que consta de 18 perlas con forma de pera que cuelgan de diferentes arcos de diamantes

Diana de Gales

Desde la infancia, Diana fue fotografiada con aretes de perlas y un simple collar de perlas a juego con sus suéteres de colores y faldas de colegiala. Sus exclusivos aros de tamaño y valor a lo largo de los años, a menudo mezclados con oro o diamantes, en estilos de botón, gota o racimo.

Sofía de Grecia

Como todas las reinas de su generación, Sofía de Grecia ha completado casi todos sus estilismos de gala con un elegante collar de perlas. Además, se sabe que la reina emérita cuenta con uno de los joyeros más importantes de toda Europa, con piezas exclusivas entre las que destacan todo tipo de collares de perlas.

Sylvia de Suecia

Las joyas de la familia real sueca se utilizan oficialmente en ocasiones como visitas de Estado, en la entrega de los Premios Nobel, cenas de gala en el castillo de Estocolmo y eventos familiares. La reina Silvia lució por primera vez una de las joyas de la Casa Real (la diadema de la princesa Sibila) la noche anterior a su boda en 1976 y desde entonces, nos ha deleitado con espectaculares alhajas de diamantes, zafiros y cómo no, perlas.

Camilla Parker-Bowles

Como era de esperar, desde antes de contraer matrimonio con el príncipe de Gales, Camilla ha lucido incontables collares, tiaras y pendientes de perlas.

Letizia Ortiz

2020 marcó un antes y un después en la relación de la reina Letizia con el joyero de pasar. Fue, junto con 2019, el año en el que la esposa de Felipe VI lució alguna de las alhajas más importantes de la familia Borbón. A estas piezas, de gran valor histórico, patrimonial y sentimental, se les llama "joyas de pasar". Y bien, este collar es la joya más valiosa que atesora la familia real española y también la más antigua. En 1846, la reina Isabel II recibió como regalo de bodas de su futuro marido, Francisco de Asís de Borbón, un collar de perlas gruesas del que pendía "La Peregrina" y una tiara de brillantes y perlas que perteneció a Luisa Carlota de Borbón-Dos Sicilias, madre del novio. La reina muere en el exilio en 1904 y sus joyas son subastadas, incluyendo el citado colgante de perlas. Alfonso XIII acude al rescate de las joyas de su abuela y con motivo de su boda con Victoria Eugenia de Battenberg le regala el collar.

Máxima de Holanda

Aunque prefiere accesorios en clave XL y de colores llamativos, lo cierto es que cuando Máxima se ha decantado por un collar de perlas, lo ha hecho con acierto y sofisticación.

Kate Middleton

Nos encanta como Kate Middleton ha actualizado esta joya tan tradicional, dándole ese aire moderno y minimalista tan característico de su estilo personal.