Los diseñadores de bolsos se visten de luto
Adiós al bolso estatus. Se acabaron la Baguette de Fendi, la Kelly de Hermes... Digamos adiós a los bolsos de 1.000 euros colgando de los brazos de las celebrities.
Esther Levy/17 de junio de 2008
¨El¨ bolso, el estatus que cuesta más que un viaje a Nueva York con hotel de lujo incluido, ¨el¨ favorito de las fashionistas, ha muerto. Esta especie no murió de causas naturales, murió victima de su propia ambición.
Murió cuando explotó la burbuja que tanto predecían los analistas de mercado, porque, aunque parezca increíble, los bolsos, como las viviendas, son iconos de estatus. Un bolso de 1.000 euros es equivalente a un apartamento de un millón ¿o no?
Si lo piensas, en la última década los bolsos tendencia llevaban un nombre, los más reconocidos: la famosa Baguette de Fendi y la Kelly de Hermés... En las grandes capitales ha ocurrido lo mismo con la inmobiliaria, han aplicado lo del nombre personal y la marca para vender edificios que dictan todo un estilo de vida: marca, estatus, poderío...
La fiebre del bolso status comenzó a comienzos de los años 90, desde entonces han pasado diez y ocho años columpiándose de los brazos más tonificados de las celebrities - y de las que quisieran aparentarlo- .
Las autoridades de la moda sospechan que ¨el¨ bolso ha sido sustituido por un bolso más personal al que titularan ¨mi ¨bolso, una interpretación algo más anónima, más sensible y más económica.
Las marcas de lujo se apuntan a la nueva aventura y es que ya no nos "pone" lo del ¨limited edition¨ ni las interminables ¨listas de espera¨.
Marcas como See by Chloe, VBH, Pauric Sweeney, Sissi Rossi, Philip Lam acaban de lanzar sus colecciones de bolsos con un punto más modesto (los puedes ver en las fotos), ideales para combinar con el modesto ritmo de estos tiempos , donde el precio y el diseño no abruman nuestro look, no se apoderan de nuestra identidad, no delatan nuestras cuentas bancarias.
Para todos aquellos fashionistas que sufren su desaparición no os preocupéis siempre los podremos recordar en todas sus reencarnaciones.

Murió cuando explotó la burbuja que tanto predecían los analistas de mercado, porque, aunque parezca increíble, los bolsos, como las viviendas, son iconos de estatus. Un bolso de 1.000 euros es equivalente a un apartamento de un millón ¿o no?

La fiebre del bolso status comenzó a comienzos de los años 90, desde entonces han pasado diez y ocho años columpiándose de los brazos más tonificados de las celebrities - y de las que quisieran aparentarlo- .

Las marcas de lujo se apuntan a la nueva aventura y es que ya no nos "pone" lo del ¨limited edition¨ ni las interminables ¨listas de espera¨.

