Hablamos con Jorge Vázquez, el diseñador del "impecable"
El diseñador gallego ha abierto un nuevo capítulo de su prodigiosa carrera con la inauguración de su nueva tienda en la calle Serrano. Entre sueños y trabajo constante, Jorge Vázquez nos cuenta los secretos del éxito. En una palabra: pasión.
Femenina, fresca y elegante. Así se define la nueva tienda de Jorge Vázquez, la concretización de un sueño para el diseñador, en constante evolución. El artista gallego abre un nuevo capítulo de su carrera en la calle Serrano, con un espacio rosa palo repleto de espejos y detalles sofisticados, a su imagen. Jorge Vázquez cuida el detalle, la elegancia en su sentido más absoluto, con materiales nobles y cálidos que visten a la mujer guapa en todos los aspectos y sobre todo, en cada momento de su vida. Con vaqueros y prendas de punto para el día a día, suntuosos vestidos de plumas para ocasiones especiales… los modelos tan variopintos como exquisitos plasman una seña de identidad marcada y reconocible, que ha conquistado el corazón de numerosas celebrities.
Apasionado por el diseño en todas sus vertientes, el creador que empezó en el gigante Inditex no se imagina dedicarse a otra cosa que la “ropa” y recuerda, con una mirada realista pero benevolente, una trayectoria en la que ha tenido, como todos, sus momentos buenos y malos. Jorge Vázquez recalca la importancia del cuidado estético, la preocupación por lucir impecable sin jamás renunciar a su esencia y el efecto “disfrazado”. El asesoramiento, la elección adecuada de prendas y complementos según el momento, en definitiva, la recuperación de una estética perdida por el flujo constante de tendencias, que van y vienen sin encontrar jamás su lugar. Maestro del diseño, elige las materias antes de diseñar, y nunca pierde de vista el delicado equilibrio entre la visión puramente artística y comercial. La experiencia ha permitido al artista desarrollar su talento, adaptando sus creaciones a las necesidades de las mujeres y permaneciendo fiel al savoir faire.
Jorge Vázquez, que se define como "clásico y tranquilo", nos ha abierto a la vez las puertas de su nuevo éxito en el corazón del barrio de Salamanca y su mente, con una sinceridad, seguridad y encanto desconcertantes. Déjate conquistar.

Para significa un sueño. Ya tenía tienda en Madrid pero siempre he visto la calle Serrano, el barrio de Salamanca como algo de increíble, donde están todas las tiendas importantes e internacionales. Al final montar una tienda aquí ha sido un sueño realizado que es un nuevo proyecto, nos llena de ilusión a todo el equipo, teníamos muchas ganas. Fue el primer local que vimos, después de haber visto otros, y nos quedamos con este.
Decidí dedicarme a ello porque en mi casa siempre hubo negocio textil viví con esto desde pequeño. Recuerdo un taller que tenía mi madre, siempre estaba rodeada de 30-40 modistas. Los veranos los pasaba allí, en la Coruña. Estaba allí con las telas, cortando pegando, viendo cómo se probaba, como cosían, planchaban. Siempre fue un mundo que me fascinó. Cuando terminas tu COI decides estudiar algo. Cuando todo el mundo elige arquitectura, económicas, empresariales… yo salgo con que quiero ser diseñador.

Realmente, donde yo me formé fue en España. Entre lo que había vivido con el tema familiar más mis estudios aquí en Madrid, aquello fue un extra. Fue una experiencia, una forma de vida. Luego vuelves y la realidad es otra: te pones a trabajar y te cambia todo aquello que tienes idealizado del mundo de la moda. Estados Unidos es mucho más comercial, me encantaría desfilar allí pero al final mi base y todo lo que he aprendido está en España.

El mejor es el que estoy viviendo ahora mismo, y el peor fue hace varios años cuando perdí mi marca por una sociedad. El perder tu marca que es tu nombre, lo que pone tu DNI, fue un palo muy grande. Pero bueno, se recuperó y vuelvo a ser Jorge Vázquez y creo que ahora es el mejor momento en el que he estado.

Creo que mi familia. Al principio tenía sus dudas y miedos, pero una vez que tomé la decisión y entré a trabajar en Inditex, vieron que podía ser un futuro real. Muchos amigos llevan apoyándome desde hace mucho tiempo, creen en mí, me apoyaron en momentos bajos. Siempre están ahí. Es un mundo complicado en el que todo depende de las ventas, estás expuesto cada 6 meses a que sea bueno o malo, a que te juzguen, te analicen, te valoren y al final hay momentos complicados y bajos. Ellos siempre están ahí, al igual que mi gran equipo.
Me inspiro en la mujer, me encanta ver a una mujer guapa. Me gusta ver a la gente que se arregla, tengo un montón de clientas que dicen: “Hueles bien y tienes una imagen de limpito” y me gusta. Entiendo que no soy la norma, ahora mismo lo normal parece ser otra cosa. Me gusta ver a una mujer arreglada, con sus labios pintados, con su bolso… creo que hay que recuperar eso.

Empiezo siempre por los tejidos. Lo primero es el tejido y el color y de ahí vamos diseñando. Sé que hay gente que primero diseña y luego busca las materias primas. Yo busco primero la materia prima, selecciono todo aquello que me llama la atención por algún motivo, que me parece nuevo porque es una textura nueva o un color diferente que nunca he empleado, porque tiene una caída especial… a partir de esta selección hago un colorín a partir del que preparo mi colección e incluso busco una temática, para darle un hilo conductor a esta ropa. De allí empiezo a diseñar las prendas. Vemos las cosas que funcionan, que se venden, cosas nuevas, cosas que quieres probar para alimentar a esta clienta.
Lo más importante a la hora de diseñar es conseguir un equilibrio entre lo que me gusta, lo que creo que va a gustar al público y lo comercial. Nunca puedo perder de vista que somos muchas personas que vivimos de esto. Al final si no se vende es un fracaso, cuando estas diseñando un pantalón, una chaqueta… pienso en: “¿Se va a vender?”. Puede ser muy bonito, muy especial, pero nadie se lo compra y para mí es un fracaso. Yo disfruto viendo a la gente comprar, para mi este el éxito.

Me encantaría que todo el mundo tuviese este fondo de armario y esta prenda de tendencia, la de la temporada lo que pasa es que al final el low cost ha hecho cambiar todo esto la gente ya no tiene. La gente se compra ropa que usa, la tira y se compra otra. Sí que Jorge Vázquez tiene estas prendas, esta camisa, este jersey, esta americana, este abrigo… que inviertes en calidad, este patrón que te puede durar varias temporadas. A lo mejor te cansas de ponértelo pero unos años más tarde lo puedes rescatar. Hoy por hoy poca gente tiene fondo de armario.
Esta temporada, creo que hay que tener algo estampado, especialmente floral, una piel de color, alguna pluma para ocasiones especiales, unas botas altas… es como lo más representativo. Una prenda de piel sintética… con eso puedes tener toda la tendencia, las cuatro o cinco prendas para estar a la moda.

A Carolina de Mónaco, a Gwyneth Paltrow, a Penélope Cruz… Jorge Vázquez abarca a muchas mujeres, muy diferentes, cada una puede llevar una prenda de Jorge Vázquez. Tenemos un abanico de productos y estilo que se adapta a una mujer femenina, que se quiere ver guapa, que tiene este toque elegante, que no es vulgar, que no busca las estridencias, el “es caro”. Entra mucha gente a formar parte de este estilo.

Es una actitud. Con el estilo se nace, aunque se puede hacer, aprender y conseguir un estilo propio pero creo que es fundamental el nacer, tener esta inquietud, esta chispa, esta magia que llevamos dentro. Hay gente con mucho dinero que no tiene estilo. Es más actitud y una forma de vida. El estilo que forma parte de tu casa, de tu armario, de tu sofá, de tu estilo de vida…
En cuanto al mío, creo que soy un hombre muy clásico, muy tranquilo, me gustan las cosas buenas, me gusta ir impecable pero sin salirme del tiesto, no sigo la tendencia. Prefiero ser más neutro con colores como el negro, grises, camel, azul marino, mucha camisa blanca y en verano quizá me atrevo con más cosas pero soy tranquilo, clásico.

No tienes que disfrazarte, tienes que ser tú misma. Y después buscar ayuda, el asesorarte y confiar en las personas que te pueden ayudar en cualquier tienda, un buen asesoramiento hace que sea un éxito para una boda, una fiesta. En el día a día salimos todos más airosos pero en ocasiones especiales es donde la gente tiene que ponerse en manos de expertos o pedir opinión. Se ha perdido a veces las normas de etiqueta, la gente no sabe cómo tiene que ir a los sitios, en el día a día todo vale, es más fácil. La clave es ser uno mismo, no disfrazarse, no sabrás manejarte si intentas parecer lo que no eres.
Creo que el secreto del éxito es la constancia y el trabajo. Es fundamental. No sé hacer otra cosa si no es trabajando, creo que un sofá no te viene el éxito y la musa, tienes que ponerte para que salga. Y el poder mantenerte es el éxito, una colección bonita la podemos hacer todos, pero luego hay que hacer otra, y otra, y otra… es lo complicado. El mercado es el que te da las pautas, el que te dice si bien o mal, si has patinado. Es fundamental el poder mantenerte.

Me lo pregunto muchas veces. Si no fuese diseñador, no sé qué sería. Como me encantan las flores quizá… me encanta la jardinería. Sería jardinero, diseñaría jardines, y me dedicaría al paisajismo. No sé hacer otra cosa que sea ropa.

Este ha sido el más grande para este año, de momento nos vamos a quedar allí. Hay cosas en el aire, acabamos de lanzar una colección de novia prêt-à-porter que se distribuye en las tiendas de Vicky Martín Berrocalen Victoria, una colección de gafas… creo que de momento nos vamos a relajar, pensar, ver que funciona y entonces ponernos a otras cosas. Quedan muchas cosas por hacer, una de ellas es la perfumería. Está en un momento en el que la marca tiene una identidad y un sello.

No sé si es gallego, pero “Todo pasa por algo”.