Las joyas más famosas de Van Cleef & Arpels
Estelle Arpels y Alfred Van Cleef se unieron para crear una de las firmas de joyas más lujosas del siglo xx. No te pierdas las fotos de sus piezas más famosas.

En 2011, Van Cleef & Arpels fue una vez más la firma elegida por el Principado de Mónaco para adornar a una novia Real. Al igual que hizo su padre con Grace Kelly, Alberto de Mónaco, le regalaba a Charlene Wittstock este modelo de Van Cleef & Arpels.

Este anillo de rubí y diamantes,que perteneció a Elizabeth Taylor, fue vendido por 3,182,554.5 euros en una subasta en Christie´s junto con otras piezas de la actriz. Esta joya además de ser la mas cara, vendida, de Van Cleef & Arpels tiene el record por ser el rubí más caro del mundo.

Elizabeth Taylor y Richard Burton mantuvieron una de las relaciones mas turbulentas de la historia de Hollywood. Este collar de Van Cleef & Arpels, una de las firmas favoritas de la actriz, fue un obsequio del actor en 1971,antes de su sonada primera separación en 1974.

Grace Kelly se convertiría en princesa al casarse con Rainiero de Mónaco,el 18 de abril de 1956, quien para la ceremonia le regalo este set de perlas y diamantes de Van Cleef & Arpels.

El duque de Windsor abdicó al trono británico para casarse con Wallis Simpson el 3 de Junio de 1937 y en el 40 cumpleaños de la duquesa le regaló esta gargantilla de rubíes y diamantes de Van Cleef & Arpels

La conocida actriz Isla Fisher eligió combinar su look con joyas de Van cleef & Arpels y lleva tres pulseras-brazaletes de la colección Palmyre, que mezclan diamantes, oro blanco, platino y galuchat.

Van Cleef & Arpels en un principio intentó ofrecer una línea de joyas más joven y accesible, introduciendo esta serie de clips tipo dibujos animados. Estos divertidos broches llamaron la atención de grandes divas, fans reconcidas de la firma, como Grace Kelly o Jackie Kenenedy Onassis.

Barbara Hutton, considerarada una de las mujeres más ricas del mundo durante el siglo xx y amante declarada de las joyas, mantuvo una estrecha relación con la firma Van Cleef & Arpels. Estando en París llamó a Pierre Arpels y le pidió que fuera a visitarla a su habitación porque estaba enferma. La leyenda cuenta que se la encontró tumbada en la cama con esta tiara de 22 diamantes.