25 películas que ayudan a subir los niveles de autoestima
Muchas veces, cuando estamos viendo una película no nos damos cuenta del mensaje profundo que nos está intentando transmitir. Las ideas se infusionan en la historia para que las lecciones bajen mejor garganta abajo. En ocasiones tenemos que verlas una y otra vez hasta que somos que el argumento deja paso al mensaje y somos conscientes de las ideas, o valores, marcados por los guionistas. Pueden las películas tener diálogos, frases, citas inspiradoras a lo largo de toda la trama, o simplemente un mensaje implícito que, sin darnos casi cuenta, muchas veces nos marca.
La mayoría de esos mensajes también nos dan muchas lecciones, como cuando Will Smith en En busca de la felicidad lucha con todas sus fuerzas, a pesar de que las cosas nunca le salen bien, por salir adelante y conseguir uno de sus sueños. Charlie y la fábrica de chocolate, con su lección de perseverancia donde intentan transmitir que con trabajo duro siempre podremos cumplir nuestros sueños por muy descabellados que parezcan. O incluso las lecciones que nos dieron Intocable o La vida es bella que nos hacen ver que muchas veces nos quejamos por tonterías y que lo negativo siempre se ve mejor con humor.
Otras, como El rey león, son películas que hemos visto una y otra vez desde nuestra infancia. Quizás de niñas del todonunca nos habíamos reparado en el mensaje profundo y sabio que nos daba el mono Rafiki: Nunca hay que estancarse pensando en el pasado, siempre hay que mirar hacia adelante y aprender de lo ocurrido. O la lección de amor que nos dieron Hachiko, Orgullo y prejuicio o Posdata: te quiero con las que quedamos realmente prendadas y lloramos como verdaderas magdalenas.
Siempre habrá mensajes ocultos entre los diálogos, pensamientos profundos de protagonistas o incluso tramas secretas que se descubren con pausa y lentitud a lo largo de toda la película. Son muchos los filmes que nos han enseñado grandes cosas a lo largo de los años, pero hemos hecho una pequeña selección de nuestros preferidos. Entre ellos, La lista de Schindler, Antes del amanecer, Cadena perpetua o El padrino. ¿Qué mensaje es tu preferido?

De las películas podemos aprender mucho, sobre todo ideas relacionadas con nuestra autoestima. De El lado bueno de las cosas nos quedamos con que, aunque en el pasado se hayan cometido errores, no debemos dejar que nos condicionen el futuro.

La película En busca de la felicidad nos mostró que, por muy hundidos que estemos, no debemos rendirnos y pensar que es el fin. Hay que continuar hacia delante y no únicamente por nosotros, también por los que nos rodean.

Gracias a Bridget Jones y su braga faja sabemos que, lo que para una misma supone un gran complejo, para los demás es algo que pasa totalmente desapercibido. ¡Adiós, baja autoestima!

De las diferentes adaptaciones de la novela de Lewis Carroll, Alicia en el país de las maravillas, sacamos una lección muy importante: siempre que necesites ayuda, confía en los que te rodean, pues siempre estarán ahí para ti sin cuestionar nada.

De El discurso del Rey tomamos la idea de que siempre podemos superar nuestros miedos y que, además, no debemos dejar que nadie nos infravalore por tenerlos.

Si algo aprendimos de Willy Wonka en Charlie y la fábrica de chocolate es que con perseverancia y trabajo duro siempre conseguiremos cumplir nuestros sueños, por muy descabellados que parezcan.

"Todos necesitamos ser aceptados, pero tenéis que entender que vuestras convicciones son vuestras”. El club de los poetas muertos nos demostró que nuestras ideas son igual de válidas que las del resto, así que no debemos dejar que nadie nos impida expresarlas.

No por ser una película para niños Buscando a Nemo iba a dejar de darnos lecciones de autoestima. ¿La más importante? Que pase lo que pase, “sigue nadando, nadando, nadando”, y continúa mirando hacia el futuro.

Juno demostró que tomar tu propia decisión, aunque los demás crean que no es la acertada, no debe importarte. Así que no bajes ante nadie la cabeza y defiende tu postura.

Terminamos con una de las lecciones más importantes de autoestima, y por ello la tomamos de dos películas. Intocable y La vida es bella nos mostraron que todo lo negativo se ve mejor con humor, así que no te dejes hundir por nada y ¡sonríe a la vida!

Ante todo siempre hay que intentarlo y nunca perder la esperanza por muy mal que salgan las cosas. "La esperanza nunca muere. Nunca hay que rendirse".

Esta película nos enseña que hay que conocer a los que te rodean para evitar sorpresas, traiciones… Y que la familia siempre es lo primero.

Otra de las películas que nos intenta convencer de que nunca hay que perder la esperanza. “Cuando no hay nada en que creer, cree en la esperanza”.

Hay que seguir para adelante y siempre pensar en lo que va a venir, nunca en el pasado “El pasado puede doler, pero, tal como yo lo veo, puedes huir de él o aprender”.

“Sólo si encuentras paz en ti mismo encontrarás una verdadera conexión con los demás”. Hay que estar a gusto y preocuparse primero de uno mismo para poder estar bien con los demás.

“Todas las oportunidades marcan el transcurso de nuestra vida, incluso las que dejamos ir”. Todo pasa por algo, lo malo nos hace aprender, siempre hay oportunidades.

“Mañana volverá a amanecer y quién sabe qué traerá la marea”. Hay que mirar hacia adelante y no bloquearse porque algo no salga como uno quiere.

Siempre hay que atreverse a hacer algo, el no ya lo tienes, pero nunca quedarse en intentarlo, hay que ponerle todas las ganas. “No lo intentes. Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes”.

Nos da una gran lección: “No hay forma de parar a una persona que tenga una gran fuerza de voluntad”. La voluntad de uno mismo es lo que nos da fuerzas y nos lleva a conseguir las cosas.

“Debes dejar de mirar el mundo con la mente. Tienes que mirarlo con el corazón”.

Esta película cuenta la historia de Stephen Hawking y su dura lucha contra la enfermedad que hace que poco a poco sea cada vez más dependiente de los demás, pero que no le impide llegar a conseguir sus sueños. “Por muy dura que nos parezca la vida, mientras haya vida hay esperanza”.

“El odio es un lastre. La vida es demasiado corta para estar siempre cabreado”. Hay que tomarse la vida con calma.

Nos enseña que el amor incondicional perdura para siempre y la lealtad va de la mano.

No importan las clases sociales ni la opinión de los demás, el amor puede nacer a primera vista y no debemos dejarnos llevar por las apariencias, a veces en el silencio más profundo se esconde el verdadero amor.

Aun cuando no está presente en tu vida, puede ayudar a curar el vacío que deja tras su partida. El amor no tiene fin.