Así es la emprendedora española en 2019
Con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, el próximo 8 de marzo, analizamos en detalle su perfil, evolución y comportamientos.
Ser emprendedor supone tomar decisiones, asumir riesgos, renunciar a otros proyectos y trabajar con esfuerzo y dedicación. Son cada vez más las personas con o sin experiencia que se lanzan cada año a por esta aventura: crear su propia empresa. ¿Cómo consiguen afrontar este reto las emprendedoras de nuestro país? Es lo que ha averiguado el Estudio Global de Emprendimiento Amway (AGER) 2018, elaborado por la multinacional Amway junto a la Escuela de Negocios de la Universidad Técnica de Múnich y la empresa de estudios de mercado GfK. AGER 2018, la última edición del informe de Amway publicado en marzo de 2018, cuenta con una muestra de más de 48.998 hombres y mujeres de 14 a 99 años procedentes de 44 países, entre ellos Alemania, Bélgica, Francia...
En el marco de la emancipación de la mujer a nivel global, los datos recopilados sobre el modelo de la emprendedora son esperanzadores. Precoces, optimistas y plenamente dedicadas a su negocio, se lanzan de manera más importante a por la gran aventura. Tal y como lo recalca el informe, son cada vez más en emprender y disfrutan más del trabajo en equipo, con un contacto directo, ofreciendo el producto. Y como no, prefieren optar por desarrollar un proyecto de ayuda a la sociedad. Aunque queden esfuerzos por hacer, principalmente sobre la percepción de los emprendedores españoles y las ayudas aportadas el ámbito empresarial crece de forma imparable. ¿Qué impulsa este crecimiento? Uno de los factores es sin duda alguna el cambio generacional. Los ‘millenials’, la generación de emprendedores de entre 20 y 30 años, crean su propia ‘start-up’ con mucha creatividad y optimismo. Talentos que toca explotar, en definitiva.
Con motivo de la celebración tan especial del Día internacional de la Mujer el próximo 8 de marzo, destacamos 10 datos clave que nos permiten entender mejor la evolución y el ADN de la mujer emprendedora española. Te lo adelantamos: su perfil es tan atípico como positivo. La transmisión de valores tan positivos debería animar a más mujeres a gestionar su propia empresa pero sobre todo a tomar riesgos en su día a día. Arriesgarse, luchar lo que realmente quiere, no dejarse paralizar por miedos y procurar avanzar, sola o acompañada. La capacidad de trabajar duro es la habilidad más importante según el conjunto de los encuestados. No en vano.

Un primer dato de lo más sorprendente: la emprendedora española prefiere el trato face to face. El 87% atienden personalmente a sus clientes.

El 45% de las mujeres encuestadas declaró querer crear su negocio en beneficio de la sociedad, cuando solo el 32% de los hombres apuestan por esta opción.

El 45% de mujeres a nivel global opta por crear un negocio orientado al beneficio de la sociedad...

Conviene sin embargo precisar, el 55% de las mujeres prefiere obtener beneficio económico en su negocio.

¿Qué ofrecerían las mujeres en su negocio ideal? Una de cada dos se decanta por los productos. Los hombres, en este caso, son mayoría en preferir los servicios (59%).

Las españolas también se diferencian de las mujeres de otros países: el 53% de las encuestadas a nivel mundial se inclinan por un negocio basado en los servicios.

Un 72% quieren emprender dentro de las áreas metropolitanas, una cifra superior a la media del resto del mundo (65%).

Hay más mujeres (40%) que hombres (36%) dispuestas a emprender por su propia cuenta.

Las mujeres españolas se encuentran con una barrera a la hora de arrancar un negocio: el acceso a la financiación. Solo el 7% de las encuestadas cree que el estado actual de la economía es beneficioso para emprender, según recalca el estudio.

El 27% de las mujeres en España ve la necesidad de recibir más apoyo económico para emprender.

Como lo lees: a la hora de emprender, las mujeres (44%) tienen más miedo a fracasar que los hombres (39%).

Las españolas también se diferencian de las mujeres de otros países: el 53% de las encuestadas a nivel mundial se inclinan por un negocio basado en los servicios.