
La pasión de Isabel II por los perros corgi
La reina de Inglaterra tuvo su primer corgi a los siete años, se llamaba Dookie y fue un regalo de su padre, el rey Jorge VI.
A pesar de su apariencia fría y distante, la reina Isabel II vuelca todo su amor en sus perros corgi, una raza por la que siente predilección desde que era pequeña. Con solo siete años recibió el mejor regalo que puede esperar una niña de su edad, su primer perro. Su hermana Margarita y la reina de Inglaterra decidieron llamarlo Dookie, el cachorro se convirtió en el primero de mucho corgis que habitarían el palacio de Buckingham.
Tras la muerte del pequeño Dookie, llegó una corgi a la que pusieron el nombre de Jane. La segunda mascota de palacio sufrió un trágico final al sufrir un atropello mortal. En 1944 Isabel II cumplía 18 años y recibió su regalo favorito, una corgi a la que llamó Susan y que se convirtió en la primera de una larga lista de corgis de la misma familia. La reina de Inglaterra se encargaba personalmente de escoger a los machos que posteriormente cruzaría con su perrita para continuar con la dinastía canina. Susan se convirtió en la más fiel compañera de Isabel II, tanto es así que la acompañó incluso en su luna de miel con el príncipe Felipe.
En total, la reina Isabel II ha tenido más de una treintena de corgis, la mayoría de ellos descendientes de su querida Susan. Aunque toda historia de amor tiene un final y la de Isabel II y los corgis llegó al suyo en el año 2015. La reina decidió dejar de criar corgis por verse más limitada debido a su avanzada edad, así que se dispuso a disfrutar de la última línea de sucesión canina. Willow, Candy y Vulcan han sido los últimos corgis de la reina Isabel II. Willow falleció en 2018 con casi 15 años de edad tras sufrir un cáncer, Vulcan murió en 2020 y Candy es la única corgi que todavía permanece al lado de la monarca. Está por ver si alguno de sus hijos o nietos continúa con la tradición de los corgis, una tradición conocida por todos los ingleses que, en muchas ocasiones, le han hecho regalos basados en sus gustos caninos.

Cindy Lass es una artista británica que decidió hacer de los corgis de Isabel II el motivo de su obra.

Inglaterra conoce bien a su reina y los más pequeños también saben de su predilección por sus mascotas.

Por el palacio de Bickingham ha pasado más de una treintena de perros corgi.

Esta divertida imagen de la Familia Real Británica hecha de cera, incluye a dos corgis en carne y hueso.

Isabel II no suele acercarse mucho a las masas, pero si se trata de un corgi no se lo piensa dos veces.

La reina es muy querida en su país, y los ingleses no pierden la ocasión de tener este tipo de detalles con ella.

Isabel II ha estado acompañada en los buenos y malos momentos por sus perritos.

Además de protagonizar cuadros, sus perritos también son objeto de esculturas de arte.