Con el Día de la Madre a la vuelta de la esquina, no hemos podido evitar preguntarnos quiénes son actualmente las madres con más estilo y elegancia a nivel internacional. Mientras cavilábamos en esto, caímos en la cuenta de que todavía podíamos rizar el rizo un poco más y acercarnos a las progenitoras más mediáticas del momento, esas cuyos looks siempre se encuentran en el punto de mira, se analizan hasta el último milímetro y, por eso mismo, no se eligen precisamente al azar: las “royals”.
A pesar de contar con la ayuda de estilistas -como sucede con prácticamente todas las celebrities- seguir el código de vestimenta de las Casas Reales no es sencillo. Antaño sus normas eran bastante férreas, aunque muchas de las princesas, reinas y aristócratas de esta lista hayan logrado “reescribir” ciertos aspectos del protocolo y actualizar algunas de sus anquilosadas reglas. Precisamente esa etiqueta o vestimenta formal es la que podría complicarles el hecho de ser un referente de moda e incluso auténticos iconos, pero nada más lejos de la realidad. Kate Middleton, la reina Letizia, Máxima de Holanda, Mary de Dinamarca… todas ellas han sabido elegir las prendas adecuadas para cada ocasión, siendo fieles a su propia línea estética. Cada una luce un depurado estilo propio y una identidad más que reconocible.
Acostumbradas a estar en el foco mediático día sí y día también, las ‘royals’ nos sorprenden en muchísimas ocasiones a la hora de escoger sus outfits, inspirando cientos de looks y logrando convertir algunas de las prendas que visten en auténticos superventas. Por ejemplo, recientemente la reina Letizia lucía un vestido de punto con bordado floral en Málaga, firmado por Galcon Studio, que se agotaría en cuestión de horas. Lo mismo sucedió con el colorido modelo de Tory Burch con el que Kate Middleton apareció en Belice o el vestido de Zara que Carlota Casiraghi escogía para la pre-boda de su hermano Pierre y Beatrice Borromeo.
Sin duda, las madres royal marcan tendencia haciendo gala de sobriedad y sofisticación, pero… ¿cuál de estas 10 mujeres gana la batalla de estilo?¿Quién es para ti la más elegante entre todas ellas?
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Rania de Jordania
La reina Rania de Jordania es todo un referente y un icono de estilo dentro del universo ‘royal’. Pero no exclusivamente cuando se trata de looks de alfombra roja para las grandes ocasiones de la mano de firmas como Salvatore Ferragamo o Valentino, sino también cuando se atreve con las últimas tendencias, marcas low cost como Zara y prendas tan poco usuales entre la realeza como las faldas de cuero o los pantalones de corte deportivo. Entre sus looks más memorables, no podemos obviar su estilismo de invitada en la boda de Felipe VI y Letizia con camisa blanca y falda larga de encaje con fondo malva, de Givenchy. Una combinación que sigue inspirando al universo BBC.
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Kate Middleton
La duquesa de Cambride logra convertir en viral cada una de las prendas que luce en sus apariciones públicas. La ‘royal’ británica ha sabido adaptar el férreo código de estilo de la Casa Real británica a siluetas contemporáneas, looks informales tan sofisticados como actuales y estilismos de red carpet que nos han dejado boquiabiertas. Entre sus firmas predilectas se cuelan Alexander McQueen, Jenny Packham, L.K. Benett y Alessandra Rich. ¿Una prenda? Indudablemente, los vestidos ‘midi’. Entre sus colores más recurrentes se encuentra el rojo, el verde botella y, sobre todo, el azul eléctrico. Domina como nadie el uso de accesorios: tocados, diademas y pamelas.
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Letizia Ortiz
De la mano de su estilista, Eva Fernández, la reina Leitizia es todo un icono de estilo, artífice de los looks más imitados y portadora de algunas de las prendas más buscadas -y agotadas- del momento. Sus elecciones, siempre acertadas con la ocasión y llenas de connotaciones, van desde los vestidos lady, pasando por las faldas de diferentes largos y siluetas, hasta blusas y pantalones de pinzas que combina a la perfección con las chaquetas de moda. Manuel Pertegaz y Felipe Varela son algunas de sus firmas de cabecera en actos oficiales, mientras que para el resto de encuentros y actividades menos formales se decanta por Uterqüe, Massimo Dutti, COS o Hugo Boss. ¿Uno de sus sellos? Los tacones de vértigo.
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Máxima de Holanda
La reina de los Países Bajos, Máxima de Holanda, se ha erigido en monarca de estilo con looks que van un paso por delante del resto de las royal en lo que se refiere a apuesta por el color o los estampados. Máxima domina como nadie los estilismos monocromáticos, siendo precisamente una de sus señas de identidad, no teme a las tonalidades más vibrantes de la paleta cromática y se atreve con estampados que no dejan a nadie indiferente. Las firmas fetiche de la reina holandesa son Jan Timiniau, Natan, Chanel o Valentino, sin dejar atrás sus guiños a Inditex de la mano de Zara. No existe silueta que se le resista ni sombrero que no se haya puesto, su accesorio por excelencia.
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Carolina de Mónaco
La primogénita de Raniero III de Mónaco y Grace Kelly heredó el allure y la belleza de su madre. A sus 65 años, Carolina de Mónaco continúa siendo todo un referente de elegancia y sofisticación, la propia de alguien que fue influencer cuando esta palabra ni siquiera se utilizaba en el acervo popular. Y es que, muchísimas de las tendencias que están en boga hoy día, Carolina las vestía ya hace 40 años. Trajes de chaqueta, bailarinas, abrigos oversize, camisas con lazo, perlas… ¿Una firma a la que le es fiel? Sin duda, Chanel.
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Carlota Casiraghi
Seguimos sin salir del Principado de Mónaco -y en él vamos a hacer un par de paradas más, ya te lo adelanto-, y es que es imposible nombrar a Carolina de Mónaco y no hacer lo propio con su digna sucesora: Carlota Casiraghi. Su estilo personal la ha convertido en foco de atención, tanto que incluso logró eclipsar al resto de la familia Grimaldi en el Día Nacional de Mónaco durante su última aparición pública. Trendy donde las haya, su elegancia innata y su estilo sin complicaciones la traen directa a esta lista. Si tenemos que mencionar a sus firmas de cabecera recurriríamos a tres grandes maisons: Chanel, Gucci y Saint Laurent.
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Beatrice Borromeo
Hace menos de un año, la revista británica Tatler coronaba a Beatrice Borromeo como la royal más chic del planeta, por encima incluso de su cuñada Carlota Casiraghi. La aristócrata italiana domina las últimas tendencias, incluso las más controvertidas, y se atreve con los vestidos naked, pasando por los ‘total looks’, el estilo lencero o los vestidos plagados de lentejuelas. Armani, Dior, Valentino o Alberta Ferretti se cuelan entre sus fetiches.
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Charlene de Mónaco
Mientras el resto de la casa real monegasca suele ser fiel a un estilo bastante marcado, la estética de Charlene de Mónaco es mucho más impredecible. De hecho, en la última década hemos podido ver a la princesa con maxivestidos de Alta Costura firmados por Armani al más puro estilo old Hollywood, capas, trajes, pantalones de piel, vestidos lenceros, dos piezas con falda midi… ¡no hay look que se le resista! Eso sí, entre todos ellos, Charlene controla como nadie los conjuntos de blazer y pantalón, ya sea en forma de smoking o de look informal.
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Victoria de Suecia
De toda esta lista, podríamos decir que la heredera al torno de Suecia es la más comedida, sobria e incluso clásica. Sin embargo, también es cierto que la princesa Victoria siempre hace uso de básicos atemporales de lo más inspiradores para componer los perfectos looks de oficina: faldas ‘midi’ junto a chaquetas en tweed, trajes de pantalón, abrigos cruzados de paño, pantalones sastre rectos… ¡Victoria de Suecia es toda una fuente de working looks!!
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Mary de Dinamarca
La australiana Mary Donaldson llegó hace casi dos décadas a la Familia Real danesa y, a sus 50 años recién cumplidos, sigue siendo todo un referente de estilo en actos oficiales y en cuestión de street style. Comparada en muchas ocasiones con Jackie Kennedy por su estética sobria y elegante, siempre de la mano de las últimas tendencias de corte más clásico, ha demostrado a base de looks que sus elecciones son un acierto seguro. Al igual que otras royals siente predilección por diseñadores de lujo como Dolce & Gabbana o Prada, aunque tampoco duda sucumbir a las prendas más sofisticadas de Zara.