A los pies del lago Leman y con los Alpes como telón de fondo, Ginebra más bien parece un lugar de cuento. Sus atracciones son numerosas para el viajero de invierno. Pistas de patinaje, las mejores tiendas del mundo, lujosos hoteles con experiencias sublimes y, por supuesto, no podremos evitar la tentación de deleitarnos con su chocolate.
Sandra Álvarez, directora de The Luxury Services, traza la hoja de ruta para disfrutar de una escapada perfecta a su ciudad natal, un lugar cosmopolita que combina a la perfección lujo y glamur con bienestar y naturaleza. Hay muchas razones para hacer una escapada a Ginebra. Pero si hay una época en la que la ciudad se llena de encanto es en invierno.
Con el lago Leman a sus pies donde se reflejan sus espectaculares edificios, es mágico contemplar la ciudad con los Alpes teñidos de blanco. Nos adentramos en una ciudad muy frecuentada en esta época, no sólo por ser lugar de tránsito hacia las mejores estaciones de esquí en los Alpes suizos y franceses. Además, ofrece al viajero todos los requisitos para disfrutar de una escapada inolvidable.
Ginebra es uno de los epicentros del mundo financiero y de la diplomacia, por ser sede de organismos internacionales como las Naciones Unidas o Cruz Roja. Por eso, no es de extrañar su carácter cosmopolita y que se respire por todas partes lujo, elegancia, pero también la sencillez y discreción de sus residentes.
La Vieille Ville
Lo primero que recomendamos para descubrir la cuidad es adentrarnos en la Vieille Ville, su casco antiguo. Está lleno de calles empedradas y rincones llenos de encanto. No pasa desapercibida la Église Russe, con sus preciosas cúpulas doradas. Uno de nuestros lugares favoritos es la Place du Bourg-de-Four, un lugar emblemático y punto de encuentro habitual donde podrás disfrutar de sus concurridos cafés, fabulosos dulces o escuchar música en vivo. Y desde ahí llegamos paseando a su preciosa Catedral de Saint Pierre con sus llamativas torres góticas, donde recomendamos subir para disfrutar de las mejores vistas de la ciudad. Desde allí, bajaremos pasando por el Grand Théâtre hasta llegar al lago.
Lac Léman
Ya en el Lac Léman vemos el Jet d’Eau su famosa fuente, y podemos decir que el monumento más emblemático de la ciudad. Es muy agradable dar un paseo por la orilla o cruzarlo con sus famosas embarcaciones Mouettes. Y como visita imprescindible, merece la pena ver el Horloge Fleurie, el famoso reloj de flores creado como homenaje a la tradición relojera de la ciudad que cambia de flores cada mes.
Spa
Es difícil elegir entre tantos magníficos hoteles que ofrece la cuidad. Pero si lo que queremos es una estancia que ofrezca algo más que las mejores comodidades, elegimos La Resérve, un Hotel & Spa ubicado a orillas del Lago Leman donde sus detalles personalizados lo hacen único.Su espectacular Spa Nescens de 2.000 metros cuadrados es un verdadero remanso de paz consagrado a la salud y bienestar, que además ofrece los últimos avances en tratamientos anti-ageing de los prestigiosos laboratorios suizos Nescens. Toda una cura de belleza y salud.
Dónde comer
Difícil es recomendar un solo lugar para comer en Ginebra por la enorme y excelente diversidad gastronómica que refleja el carácter internacional de la ciudad. Una buena opción autóctona es Le Lacustre situado a borde del Lac Leman y de donde proviene Les Filets de Perche, un delicioso pescado en salsa. También elegimos Au Relais de l’ entrecote, un refinado bistrot parisino donde sirven el mejor entrecot de la ciudad que recomendamos acompañar con un buen vino de Château de Saure, proveniente de agricultura biológica. La Lucía es nuestro italiano favorito donde deleitarnos con su genuina cocina napolitana. Y por último, elegimos Chez Key, un emblemático asiático en el centro de la ciudad y The Tse Fung, en La Resérve donde disfrutar de la mejor cocina cantonesa en una atmósfera que recuerda al Shangai de los años 30.
La noche
Ginebra cuenta también con varios locales elegantes y refinados para disfrutar de la noche. El Leopard, es uno de nuestros favoritos para tomar una copa y disfrutar de su música en vivo. También elegimos Mountain Spirits en La Resérve, un acogedor y original lugar donde con una pista privada de patinaje abierta durante la estación invernal.
Joyería
Salir de comprar por Ginebra es caer rendido ante lujosas tiendas. Sus calles, además de albergar algunas de las mejores marcas de moda del mundo, son epicentro de las mejores boutiques de relojería. Pero lo que especialmente nos seduce sus espectaculares joyerías, como Avakian, lugar de donde han salido algunas de las mejores piezas de la realeza europea.
Chocolate
No nos podemos resistir a una última tentación: el placer de deleitarnos con el que se supone que es, con permiso de los belgas, el mejor chocolate del mundo. Por eso, una última recomendación es visitar la fábrica de chocolate Favarger. Con dos siglos de tradición, es un lugar único por su maestría y dominio en todos los pasos del proceso de fabricación, desde el grano hasta la tableta. Organizan unas interesantes visitas guiadas, incluso talleres para aprender a hacer tus propios bombones. ¡Irresistible!
The Luxury Services
Sandra Álvarez es directora y fundadora de The Luxury Services, un servicio concierge y de ‘lifestyle management’ dirigido a personas que desean disfrutar de una vida más plena y llena de experiencias únicas. Desde un viaje a medida, entradas para los mejores espectáculos del mundo, una cena privada con un prestigioso chef, The Luxury Services aspira a hacer realidad los sueños de sus clientes. Está presente en algunos de los lugares más exclusivos del mundo a través de una red de representantes locales, quienes seleccionan lo mejor de cada destino. Esta suiza de origen español, nos contará desde los planes más sibaritas hasta las experiencias más insólitas que no dejarán indiferente a nadie.