Hay algo completamente irracional (casi primitivo) en cómo asociamos ciertos aromas a lo sensual. Los perfumes cálidos, envolventes, con notas de vainilla, ámbar, sándalo o almizcle parecen diseñados para seducir de noche, con poca luz y mucha piel. Son intensos, profundos, adictivos. Aromas que, en el imaginario colectivo, gritan deseo y misterio.
Sin embargo, en el extremo opuesto se encuentran los perfumes cítricos: efervescentes, alegres, incluso inocentes. Frescura, energía, sensación de limpieza. Pero, ¿y si te dijera que uno de los aromas que más elogios me ha generado este verano es, precisamente, uno que tradicionalmente no consideramos sexy? Te hablo del Cymbopogon, más conocido como hierba limón o lemongrass. Esta planta de la familia Poaceae, famosa por su aroma ácido, seco y penetrante, ha sido el corazón de varios perfumes que me han regalado comentarios inesperadamente halagadores. Y uno en particular ha acaparado todas las preguntas.
El perfume cítrico con hierba limón por el que más me han preguntado este mes
Lemonade Grenade de The Raconteur, una fragancia poco conocida, pero muy adictiva
Durante el mes de julio he estado usando Lemonade Grenade, una creación vibrante de The Raconteur que, pese a ser poco conocida, ya ha conquistado a las fanáticas de las colonias cítricas más frescas y aromáticas. Cada vez que me lo pongo, alguien me pregunta qué llevo. Y la reacción es siempre la misma: sorpresa ante su energía y la manera en la que se mantiene en piel sin desvanecerse a los pocos minutos. El arranque es una explosión: limón recién exprimido, cáscara de pomelo y una punzada verde que solo puede venir del lemongrass. Nada empolvado, nada dulce. Es un perfume cítrico que enamora dentro y fuera de España, con una estela limpia, radiante y, sí, inesperadamente sexy. A medida que se va asentando, aparecen notas más verdes y terrosas que equilibran el frescor sin restarle viveza.
Lo que más me gusta es cómo consigue mantenerse presente pese a ser una fragancia profundamente fresca. Tiene esa cualidad "rara" de los perfumes bien formulados: se siente sin producir fatiga olfativa. Me parece para los días de calor extremo, para llevar a la oficina en pleno verano o incluso para oler bien después de una ducha fría en casa. En mi piel, aguanta más de seis horas con una proyección media, una duración más que notable. Su precio es de 148,55 euros en Bloom Perfume, una inversión de diez para las que sueñan con perfumes cítricos nada típicos para las que adoran las fragancias frescas, limpias y elegantes.
Otras fragancias cítricas en las que destaca este ingrediente
Karma de Lush
Si hablamos de perfumes con hierba limón que tienen carácter propio, no puedo dejar de mencionar Karma de Lush. Es una fragancia que ya lleva años en el mercado, se lanzó en 1995, pero sigue siendo una joya dentro del universo cítrico-aromático. A un precio de 40 euros, las notas de salida combinan naranja, lavanda y hierba limón, y el resultado es chispeante, casi psicodélico. Luego entran el limón ácido, el pino y un toque de casis, que le aportan jugosidad y un aire más verde. En el fondo, el pachulí, la resina de abeto y la canela le dan profundidad, haciendo que Karma evolucione con el paso de las horas hacia un terreno más cálido, incluso balsámico.
