Soy una gran admiradora de Maison Francis Kurkdjian. Creo que las fragancias de la marca son increíblemente inteligentes y eclécticas, y que su colección tiene algo para todos los gustos. Pero hay una en particular a la que siempre regreso: APOM, una de las fragancias más intensas, ricas y tradicionales de la casa. Su nombre es un acrónimo de “a part of me” (una parte de mí), y está diseñada para llevarte de viaje a través del olfato y las emociones. Aquí te cuento por qué creo que deberías tenerla en tu lista de deseos.
APOM de Maison Francis Kurkdjian, duración e intensidad
¿A qué huele APOM de Maison Francis Kurkdjian?
APOM es una de las fragancias más representativas de la marca y tiene una historia interesante. Originalmente, existían dos versiones: una para mujer y otra para hombre. Pero en 2009, Francis Kurkdjian decidió combinar lo mejor de ambas y así nació esta joya que hoy todos reconocemos. Es un perfume floral nada típico con un fondo dulce y almizclado, en el que destacan flores blancas y amarillas. Kurkdjian lo creó inspirado por un viaje a Líbano, y la fragancia combina flor de azahar, almizcle blanco, ylang ylang y lavanda, con toques de vainilla y ámbar. Olerlo es toda una experiencia sensorial. Primero, te envuelve la flor de azahar, luego emergen las capas más complejas de lavanda. A medida que pasa el tiempo, se asienta con una suavidad cremosa gracias al ámbar y la vainilla. Un viaje olfativo en toda regla.
La opinión sincera de una editora de belleza
Diría que APOM es de esas fragancias que amas o detestas. Tiene una identidad muy marcada, imposible de confundir con otra. Conozco personas que la consideran su sello personal y otras que no la soportan. Pero justamente ahí reside su belleza. A diferencia de otros perfumes icónicos y más comerciales, como Glossier You o Le Labo Santal 33, APOM no pretende gustar a todo el mundo. Y eso lo hace aún más único. No lo vas a oler en cada esquina, pero cuando lo hagas, sabrás que es algo especial.
Yo lo describiría como un perfume rico y dulce, cálido y seductor; una fragancia llena de contrastes. Necesito estar en el estado de ánimo adecuado para usarla, eso seguro. Pero cuando lo hago, sé que no pasaré desapercibida. El precio es de 185 euros por 70 ml.
Porque lo mejor de APOM es su duración. Es de esos perfumes que siguen presentes incluso después de que te hayas ido. Hace que la gente te pregunte qué llevas puesto y por qué hueles tan increíble, aunque no sepan explicarlo bien. Es un perfume caro, sí, pero dura y deja huella. Por eso, es una de mis recomendaciones favoritas tanto para quienes buscan una inversión segura como para quienes quieren iniciarse en el universo de Maison Francis Kurkdjian con un verdadero acierto.
Este artículo se publicó originalmente en Marie Claire UK por Rebecca Fearn. Traducción y adaptación: Anna Pardo.
