Uno de los momentos más esperados por la prensa internacional era la reaparición oficial de Kate Middleton tras el anuncio de su enfermedad. Alejada de los flashes durante varios meses (y con alguna que otra polémica por el camino), la inglesa recuperó parte de su agenda en compañía de su familia. Trooping the Colour, el desfile en motivo del cumpleaños de Carlos III que tuvo lugar el pasado fin de semana, fue el momento escogido para regresar al ojo público.
Relajada, sonriente y elegante a más no poder, Middleton fue fotografiada junto a su marido, el príncipe de Gales, sus hijos los príncipes Jorge, Carlota y Luis de Gales, su suegros, el rey Carlos III y la reina Camila. A su llegada al Palacio de Kensington en carruaje, la princesa de Gales no dudó en saludar a los asistentes y en regalarnos más de una sonrisa.
Para un momento tan especial como este, Middleton y su equipo de estilismo decidieron recuperar una prenda que la royal ya lució el pasado 2023. En concreto, hablamos de un vestido bicolor en blanco y negro firmado por la diseñadora británica Jenny Packham. El tocado, de Philip Treacy, unos clásicos stilettos blancos y un bolso de mano negro sirvieron como broche de oro para un estilismo que ya forma parte de la historia.
Al ver a la princesa de Gales, es imposible no pensar en el histórico outfit de Audrey Hepburn en 'My Fair Lady' (1964). En pleno auge de la nouvelle vague, el musical conquistó al público y a los críticos más exigentes y reafirmó el poder de Hepburn en Hollywood. De hecho, entre los ocho premios Oscar de la película, se encontraba el de mejor vestuario.
Cecil Walter Hardy Beaton, un fotógrafo, pintor, diseñador de vestuario y modista británico, fue el encargado de crear los estilismos de Eliza Doolitle. Beaton supo reconstruir la opulencia y el dramatismo de la época eduardiana con un nivel de detalle insuperable y su trabajo en la película sigue siendo reconocido a día de hoy. Uno de los trajes más admirados fue el icónico vestido de Ascot que utilizó Hepburn, un ajustado modelo de encaje con cola, una pamela de dimensiones XXL y varios lazos maxi.
Middleton, a su manera, toma prestados elementos claves del estilismo de Hepburn, como los lazos, la pamela y las rayas bicolor. De este modo, la princesa de Gales adapta un vestido inspirado en principios del siglo XX en un diseño formal apto para pleno siglo XXI. Sin olvidar, por supuesto, el guiño a la cultura británica, ya que 'My Fair Lady' tenía lugar en una efervescente Londres.
