Han pasado más de una década desde que Amy Winehouse, todo un icono del panorama musical a nivel internacional, y sobre todo, del jazz y el R&B, fuese encontrada sin vida a la edad de 27 años. El 23 de julio de 2011 la cantante pasó a formar parte del 'club de los 27’, compuesto por una serie de figuras reconocidas en todo el planeta que también nos dejaron en esa edad, como Brian Jones de los Rolling Stones, Jimi Hendrix, Janis Joplin o Kurt Cobain, entre otros.
Pese a que ya la ha pasado más de una década desde que tuvo lugar esta fatídica pérdida, todavía no se sabe si se iba a casar, si el consumo de drogas y alcohol fueron el detonante de su decadencia, si se suicidó o si realmente su fallecimiento se debió a una intoxicación etílica. Lo que sí es cierto es que Amy ya es una de las mujeres más influyentes para la música, e incluso se tenía previsto que un holograma con su figura recorriera el mundo en una gira durante el 2019.
Si algo diferenciaba a la artista del resto de personas, además de su voz, era su carácter extrovertido y la alegría que transmitía. Ella acostumbraba a decir claramente en los medios de comunicación que su fin no era la fama, sino componer temas que trataran algunas situaciones de su vida y hacer “lo que quisiera” sin que nada pudiera impedirlo. Por este motivo, se podría decir que la cantante llegó a aborrecer su propio tema 'Rehab’, la canción que la lanzó al estrellato de inmediato y la convirtió en una diva. Pero lo cierto es que compositora hacía caso omiso a esta fama, y siempre tuvo muy presentes sus raíces llanas.
Problemas con las drogas
La bebida favorita de Amy Winehouse era el vodka. Pero el problema apareció cuando comenzó a mezclarlo con Ketamina, éxtasis, cocaína o incluso heroína. Acudió a una clínica para desintoxicarse, pero recayó en varias ocasiones.
Tres años antes de su muerte, un doctor le diagnosticó enfisema pulmonar. Sus pulmones operaban al 70% de su capacidad a consecuencia de la cocaína crack que fumaba la artista. Esto provocó que la cantante se replanteara sus "vicios" durante unos meses, aunque la infección pulmonar siguió estando presente.
Además, estos sucesos coincidieron con la bulimia severa que también padeció y también se desveló que mantenía una relación con el cineasta Reg Traviss, con quien tenía planes de pasar por el altar.
Momentos previos a su muerte
La última aparición pública de Amy tuvo lugar el día 21, dos días antes de su muerte. La artista se presentó en el Roundhouse de Londres para apoyar el debut de su sobrina, pero fue una aparición caótica, ya que no reunió las fuerzas suficientes para cantar.
El sábado 23 de julio de 2011, su guardaespaldas Andrew Morris era quien estaba con ella. Él quiso despertarla pero sospechó que no respiraba y que mantenía exactamente la misma posición que cuando se acostó. Finalmente fue declarada muerta a las cuatro menos seis minutos de la tarde de aquel día triste para la música y para todos sus seguidores.
Los misterios de Amy Winehouse
El día 23 de julio se cumplieron 11 años de la muerte de la artista y aún hay varias incógnitas.
El club de los 27
El 23 de julio de 2011 la cantante pasó a formar parte del ‘Club de los 27’, compuesto por una serie de figuras reconocidas en todo el planeta que también nos dejaron en esa edad, como Brian Jones de los Rolling Stones, Jimi Hendrix, Janis Joplin o Kurt Cobain, entre otros.
Causas desconocidas
Pese a que ya la ha pasado más de una década desde que tuvo lugar esta fatídica pérdida, todavía no se sabe si se iba a casar, si el consumo de drogas y alcohol fue el detonante de su decadencia, si se suicidó o si realmente su fallecimiento se debe a una intoxicación etílica.
Sin intereses más allá
Ella acostumbraba a decir claramente en los medios de comunicación que su fin no era la fama, sino componer temas que trataran algunas situaciones de su vida y hacer "lo que quisiera" sin tener ningún handicap cerca que lo impidiese.
Problemas con las drogas
La bebida favorita de Amy Winehouse era el vodka. El problema vino cuando en alguno de los momentos más tristes de su vida lo mezcló con Ketamine, Éxtasis, cocaína o incluso heroína.
Enfisema pulmonar
Tres años antes de su muerte, un doctor le diagnosticó enfisema pulmonar. Sus pulmones operaban al 70% de su capacidad a consecuencia de la cocaína crack que fumaba la artista.
Bulimia severa
Además, estos sucesos coincidieron con la bulimia severa que también padeció, algo que no se supo hasta que su hermana lo desveló dos años después de su muerte.
Sin fuerza
La última aparición pública de Amy tuvo lugar el día 21, dos días antes de su muerte. La artista se presentó en el Roundhouse de Londres para apoyar el debut de su sobrina
Fallecimiento
El sábado 23 de julio de 2011, su guardaespaldas Andrew Morris era quien estaba con ella. Él quiso despertarla pero sospechó que no respiraba y que mantenía exactamente la misma posición que cuando se acostó.
Homenaje
En 2014, sus padres (Mitch y Janis) posaban para una foto junto a la estatua de su hija, Amy Winehouse después de que la construyeran como homenaje a ella en Londres.
