La herencia que Jimmy Giménez-Arnau nos dejó al morir incluye un legado significativo en el mundo de los medios y la literatura. Su muerte tuvo lugar en un ambiente íntimo, rodeado de su esposa, Sandra Salgado, y un grupo cercano de amigos. Sin embargo, la despedida pública en el tanatorio, tuvo la notable ausencia de su familia directa, incluyendo a sus hermanos y su hija, reflejo de un prolongado distanciamiento familiar.
Jimmy, quien alcanzó la fama por su participación en programas emblemáticos como Sálvame y Tómbola , se alejó de la vida pública tras su salida de Telecinco. Su relación con su familia había sufrido tensiones, especialmente con sus cuatro hermanos, debido a conflictos sobre la herencia familiar. Además, la relación con su hija, Leticia, se complicó cuando ella se mudó a Estados Unidos con su madre, Merry Martínez-Bordiú. A pesar de sus intentos de reconectar, Jimmy respetó la decisión de Leticia de mantener la distancia. En una entrevista con Bertín Osborne en Mi casa es la tuya , expresó su tristeza al respecto: “No puedo hacer nada. Ella ha elegido no verme y yo respeto eso”.
Con su partida, el tema de su herencia ha cobrado relevancia. Jimmy deseaba que su fortuna se distribuyera de manera equitativa entre su esposa e hija, a pesar del distanciamiento de Leticia. Es como un último gesto que el periodista quiso tener con su única hija quien, por cierto, actualmente vive en Miami y no ha acudido a despedirle al tanatorio en Madrid. A lo largo de su carrera, Giménez-Arnau se destacó como un personaje mediático, especialmente tras su matrimonio con la nieta del dictador Franco, Merry Martínez Bordiu, lo que le permitió acceder a importantes exclusivas y, por ende, a ingresos significativos.
El patrimonio que deja Jimmy Giménez-Arnau a sus herederos
En el ámbito literario, Giménez-Arnau exploró múltiples géneros, desde la poesía con obras como Cuya selva y La soledad distinta , hasta novelas y relatos periodísticos. Sin embargo, tras su fallecimiento, se ha confirmado que no poseía bienes inmuebles. Según el medio Vanitatis , el periodista solo tenía tres empresas a su nombre, actualmente inactivas, que no generarán beneficios para sus herederos. Estos son: Gladkat SL, dedicada a servicios artísticos; Librevision SL, enfocada en derechos de autor y explotación inmobiliaria; y Libertad Visual 333 SL, especializada en espectáculos. Por lo tanto, sus herederos recibirán únicamente los fondos disponibles en sus cuentas bancarias.
A pesar de que quienes lo conocieron mencionaron que acumuló una considerable fortuna, su amigo Kiko Hernández subrayó que no era un gran ahorrador. En ausencia de un testamento distinto, su esposa e hija heredarán su legado, que también incluirá un porcentaje de las ventas de sus obras literarias, oscilando entre el 5 y el 18%, dependiendo de los acuerdos con las editoriales.
