Seguro que has escuchado muchas veces el famoso refrán que dice que la primavera la sangre altera. Pues resulta que nuestras abuelas tenían mucha razón y que la llegada de la primavera no solo altera la sangre (o más bien, nuestras hormonas), sino que a partir de marzo, nuestro cuerpo demanda más acción en la cama que nunca. La subida de las temperaturas, el aumento de las horas de luz solar y un clima algo más apetecible son algunos de los factores que hacen que nuestra libido se desate en marzo, ya sabes eso de ni demasiado frío ni demasiado calor que muchas veces hemos dicho, es una de las principales causas de que el sexo comience a apetecer más en esta época.
La primavera es el periodo del año que más condiciona los hábitos (como la hora a la que nos vamos a dormir o qué alimentos tomar) el estado de ánimo (cuanto más sol, más alegría) la salud… y por supuesto la actividad sexual. Sin embargo, no hay que olvidar que en primavera las alergias están a la orden del día, una reacción que para algunas personas desemboca en un menor deseo sexual debido al malestar que supone el picor de ojos, los estornudos y la desgana en general. ¿A quién le apetece darse un revolcón con estornudos y nariz taponada? Al parecer, a NADIE. Por no hablar de los peligros que la pandemia del coronavirus nos ha traído... Otro de los problemas que trae marzo con su subida de temperaturas y líbido es que puede poner en evidencia los problemas sexuales que se han ocultado o se han olvidado durante el invierno, una época con menos apetencia sexual.
Las buenas noticias son que, a pesar de estos inconvenientes, marzo sigue siendo el mejor mes del año para practicar sexo según los expertos y ... ¡estamos a punto de dar la bienvenida a la primavera! Así que aprovecha la coincidencia y descubre las diez razones por las que este mes es el más ideal para deshacer la cama con tu pareja y disfrutar de lo lindo. ¡Toma nota!
Alimentación
La primavera trae consigo la llegada de las frutas de temporada, algunas con componentes afrodisíacos. Un ejemplo son las fresas, que afectan directamente a las glándulas endocrinas, por lo que liberan el estrés del organismo e impulsan la actitud sexual. Otro producto primaveral típico es el aguacate, rico en ácido fólico, vitamina B6 y potasio. No hay que olvidarse que esta estación es temporada de espárragos, que estimula la liberación de histamina, que interviene en la capacidad de alcanzar el orgasmo.

Ropa primaveral
La subida de las temperaturas también provoca que por la calle la gente vaya con ropa más ligera. Algo que potencia la sensualidad e influye positivamente en la libido y en el deseo sexual.

Actitud más positiva
Además de los efectos físicos, la primavera es la confirmación de que el invierno ha quedado atrás, algo que nos hace tener una actitud más optimista y positiva y por ende, más dispuesta a tener sexo.

Química sexual
El calor magnifica los olores de las personas, un elemento esencial en el universo sexual. Además, estos aromas inciden directamente sobre las feromonas, cuya única finalidad es la de atraer la atención del sexo opuesto. Esta mezcla hace que durante la estación las personas tengan más ganas de practicar sexo.

Menos estrés
La mera presencia del sol es buena para el organismo. De hecho, una mayor exposición también influye en que se produzca más secreción de endorfinas, que ayudan a reducir el estrés y, por lo tanto, aumentar el deseo sexual.

Vitamina D
Que el sol nos acompañe durante más horas a lo largo del día no solo es capaz de alegrarnos el día. Fisiológicamente, nos permite generar el 90% de la vitamina D solo con que nos den los rayos del mismo. ¿Y qué efectos tiene su mera presencia en el cuerpo? Genera mayor nivel de testosterona, una hormona clave en el hombre para incrementar la libido y el deseo sexual.

Mejor esperma
De acuerdo con un estudio de la Universidad Ben Gurión del Neguev en Israel el comienzo de la primavera es la época del año en la que la producción de esperma de los hombres tiene una mejor calidad y cantidad.

Más vida social
Vale que el coronavirus ha reducido nuestras interacciones sociales, pero en marzo, cuando empieza a hacer bueno, comenzamos a hacer más planes y a tener más contactos con otras personas. Quien sabe si encontrarás a alguien con quien quieras tener sexo...

Ganas acumuladas
El invierno ha sido largo... y un año de pandemia empieza a causar fatiga y hartazgo. Ante este panorama, tenemos más ganas que nunca de liberarnos, aunque sea sexualmente.

Más lugares
La llegada del buen tiempo también propicia que se abran más posibilidades para tener sexo. Ya no sólo vale la cama: con el solecito podrás tener sexo en la ducha, en una piscina, en el coche... o al aire libre, si te atreves.
