La cara más espiritual de Georgina Rodríguez no es muy conocida. A menudo se le ve en los medios de comunicación con sus posados y sus gustos por las joyas, la ropa de marca y mostrando una vida de lujo. Sin embargo, hay una cara B que no se conoce tanto de ella, su faceta de madre y sus fuertes convicciones religiosas, que le gusta transmitir a sus hijos.
Recientemente acudió con cuatro de sus hijos al Santuario de Fátima, en Portugal. Lo ha visitado en más de una ocasión, porque suele ir cuando visita el país vecino ya que es un lugar especial para ella. Además de escuchar misa, encendió velas junto a sus hijos, quizá para pedir un deseo o tal vez para rememorar aquellos seres queridos que ya no están.
Georgina perdió a uno de los gemelos que tuvo en 2022 e imaginamos que el recuerdo para ese hijo que no llegó a vivir estuvo presente en su visita a la Virgen, de la que Georgina es muy devota, como ha escrito ella misma en sus redes.
A través de sus redes sociales, Georgina compartió con sus seguidores los momentos más emotivos de su visita. Publicó un carrusel de fotos donde se ve a sus hijos portando velas y colocándolas en un lampadario, con la ayuda de su madre, mientras rezan y formulan sus deseos a la Virgen de Fátima. En estas imágenes, se puede observar cómo Georgina asiste a Eva María, Mateo, Alana Martina y Bella, subrayando la importancia que tiene para ella que sus hijos mantengan una relación estrecha con la fe y con Portugal, el país natal de su padre.
En otra de las fotografías, la influencer aparece sentada con los pequeños en uno de los bancos de la iglesia, cuya capilla fue construida en 1919. De espaldas a la cámara, se abrazan mientras escuchan la misa, manteniendo la compostura y respeto que el lugar merece. En la camiseta de Georgina se puede leer el nombre del único de sus hijos que no estaba, Cristiano Jr. y que la mujer de Cristiano Ronaldo quiso tener también presente. Por otro lado, Cristiano Ronaldo no pudo acompañar a su familia en esta visita debido a su participación en la Eurocopa 2024, que comenzó el 14 de junio.
La devoción de Georgina al Santuario de Fátima es bien conocida, pues cada vez que viaja a Portugal, ya sea por motivos laborales o personales, acude a este lugar sagrado. "Sigue guiando e iluminando mi camino, virgencita", escribió en una ocasión anterior, reafirmando su fe.
Georgina ha mostrado siempre su orgullo y devoción por su fe. En 2021, visitó la Catedral de San Pedro en Jaca, Huesca, su ciudad natal, donde agradeció por todas las bendiciones recibidas. "Tantas oraciones a tus pies, tantos deseos y lágrimas. Hoy por fin, me reencuentro contigo. Gracias por haber iluminado mi camino y haberme acompañado siempre", escribió junto a una imagen al lado del Cristo de San Pedro.
A pesar del gran momento que vive, la vida de Georgina ha tenido sus amarguras. El peor momento fue la muerte de su hijo nada más nacer, aunque sintió que tenía que seguir adelante y tenía muchos motivos para estar agradecida, haciendo referencia a los cinco niños de la familia: Cristiano Jr, de 12 años; Mateo y Eva, de 5; Alana Martina, también de 5 aunque unos meses menor; y la pequeña de la casa, Bella Esmeralda, que cumplirá esta primavera su primer año de vida.
