El espectacular vestido de noche de Lady Diana en su dieciocho cumpleaños

Así es como lucía vestida la futura princesa de Gales en el baile más importante de su vida.

Se dice que las cosas viejas deben dejarse ir, que conservar objetos y prendas vinculados a un período hermoso o a una ocasión especial es solo una forma de llenar la casa de trastos y recuerdos que no siempre envejecen bien en nuestra imaginación.

Sin embargo, la princesa Diana parecía ser una de esas personas que no se separan fácilmente de las cosas que le recordaban algo bonito.

Un vestido de hace más de 40 años que la joven de 18 años, Lady Diana Spencer usó en una ocasión excepcional: su decimoctavo cumpleaños, que fue su debut en sociedad.

Era el año 1979, el abuelo de Lady Diana, Albert, había fallecido cuatro años antes dejando a su hijo John el título de Conde de Spencer. 

Está claro que la futura princesa de Gales estaba destinada a pasar a la historia como un ícono de estilo.

Diana tenía pocas prendas en su armario y cuando tenía que asistir a algún evento, solía pedir prestado un vestido a una amiga o compañera de escuela. 

Incluso cuando un año después comenzó a salir con el príncipe Carlos, (según su famosa biografía escrita por Andrew Morton), todavía necesitaba recurrir a los armarios de sus compañeras de piso.

Pero un vestido prestado y ya usado no era una solución aceptable para su debut en sociedad. Por lo tanto, unos días antes de su cumpleaños donde hacia nada más y nada menos que 18 años, la joven Diana pidió ayuda a su madre Frances, quien la acompañó a Harrods.

En el famoso gran almacén Diana se probó varios vestidos. Al final, eligió uno de Regamus, (en ese momento la marca más popular de vestidos de ceremonia entre las jóvenes londinenses de buena familia).

El vestido del decimoctavo cumpleaños de Lady Diana era de seda turquesa con una sobrefalda de tul de nylon con lunares. Era muy romántico, con encaje en el borde, adornado con cintas de terciopelo y  más tul.

Es un vestido más económico que los que Diana usaría como princesa. La pasión por los escotes sin hombros, los volantes y el encaje son diseño que cautivan a Lady Diana. 

De la fiesta, de la cual circula solo una imagen en la que Diana está sentada en un sofá y lee una revista (en la parte superior), se sabe muy poco. No se sabe quiénes estaban allí, cómo se desarrolló la fiesta ni qué se comió o bebió.

El cumpleaños de una de las muchas jóvenes de buena familia aristocrática del Reino Unido no era ciertamente un evento destacado.

Pero se sabe que pocos minutos antes de la llegada de los invitados, Diana accidentalmente se derramó el frasco de su perfume favorito en la falda, probablemente Tea Rose, que había estado usando desde que era niña, y tuvo que dejarlo secar.

- Getty Images

Quedó una mancha que nadie notó ese día. Al día siguiente, Diana guardó en el armario el primer vestido de noche de su vida con la intención de conservarlo.

Pero en vísperas de su boda con Carlos, cuando el museo de Madame Tussaud le pidió algo suyo para vestir la nueva estatua de cera con su imagen, Diana tuvo que separarse de él porque no tenía otros que poder exhibir públicamente.

La mancha de perfume en la falda fue comentada y documentada en 2005, (casi como un valor añadido), cuando Madame Tussaud decidió incluir el vestido del debut en sociedad de Lady Diana en una subasta benéfica.

Se dice que fue adquirido por una misteriosa enfermera estadounidense que aún colecciona (maniacamente) objetos que pertenecieron a la princesa de Gales.

Sin embargo, unos años después, la mujer aceptó venderlo de nuevo a Kensington Palace (por una suma desconocida), cuyo personal lo restauró y lo exhibió en 2017 en las Galerías Pigott para la exposición "Diana: Her Fashion Story"

Acompañado de esa única foto de la joven (y ya alta) debutante, hija del conde de Spencer, que con esa fiesta hizo su entrada al mundo de los adultos.

Este artículo se publicó originalmente en Marie Claire Italia. Traducción y adaptación: Alex Jiménez

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