39 son las velas que soplará este viernes Sara Carbonero. La periodista, convertida en todo un icono del estilo boho-romántico también nos deja para el recuerdo un mantra de positividad como filosofía de vida. Prueba de ello son las numerosas frases y textos que comparte diariamente en sus redes sociales. La última de ellas, cuando daba la bienvenida al mes de febrero.
En su cuenta de Instagram, donde reúne más de tres millones de seguidores, escribía un juego de palabras sobre un atardecer. “FE-brero”, comentaba en la Red. Si bajamos la vista a su feed, podemos ver cómo tiene anclado un post con un claro mensaje. “El afecto es revolucionario”. El 24 de enero, invitaba a sus followers a una importante reflexión sobre la vida a través de una ilustración de Ernest Hemingway y un mensaje que da mucho que pensar: La persona que ha empezado a vivir seriamente por dentro, empieza a vivir más sencillamente por fuera”. Más de 40 mil likes logró con esta publicación. Y no es para menos, porque la periodista quiere transmitir una cultura y un concepto a través de la Red con la que anima a todos y todas a vivir de una manera más relajada y fluida donde la positividad prima por encima de lo demás.
Antes de terminar el año, Carbonero compartió un texto que llega al alma. Cada frase un aprendizaje. “Para dar un alivio a estas penas, que me parten la frente y el alma, me he quedado mirando la luna a través de las finas acacias. En la luna hay algo que sufre, entre un nimbo divino de plata: hay algo que besa los ojos y que seca, llorando, las lágrimas. Yo no sé lo que tiene la luna, que acaricia, que duerme y que calma, y que mira en silencio al rendido con inmensas piedades de santa. Y esta noche que sufro y que pienso libertar de esta carne a mi alma, me he quedado mirando a la luz a través de las finas acacias”, se puede leer en un escrito.
La comunicadora, que es muy celosa de su intimidad, ha encontrado en las redes sociales un refugio en el que desahogarse y mostrar su forma de ver la vida. Una vida en la que no hay cabida para las malas energías, sino todo lo contrario. Buceando en su perfil nos topamos con una fotografía de un tatuaje que ella misma ha reposteado: “Hablamos para cuando se te pase”. Palabras con las que indica que una buena conversación es el antídoto para poner solución a (casi) cualquier problema.
“Quiero hacerte lo que la música le hace a la soledad”, con esta reflexión Sara Carbonero cerraba el mes de septiembre. Reflexión que fue comentada por Elena Huelva, la joven influencer que falleció a consecuencia del cáncer y con quien mantenía una relación de lo más especial. De hecho, era común verlas juntas disfrutando de la música, el hilo conductor que hizo que tuvieran una conexión instantánea aquella tarde en Gran Vía, lugar en el que se vieron por primera vez.
Sara Carbonero ha vivido unos años convulsos tras su separación de Iker Casillas y la lucha contra la enfermedad que le diagnosticaron en 2019. La escritora sufrió un duro revés al detectarle un tumor maligno en un ovario tras una revisión rutinaria. Haciendo gala de su habitual fortaleza logró sortear este obstáculo que le puso la vida. Las alarmas volvieron a saltar hace unos meses cuando fue intervenida de nuevo, pero se desconoce los motivos por los que tuvo que recibir atención médica. Ahora, se encuentra en una nueva etapa de su vida, como siempre, en un segundo plano, junto a los suyos, sus hijos y su nueva pareja, Nacho Taboada.
