No hubo terceras personas, o al menos eso es lo que Jennifer Garner ha asegurado en una entrevista concedida a una famosa publicación en la que ha abierto su corazón sin condiciones. La confesión de Garner ha llegado en un momento clave, sólo unas horas después de que viéramos al ex matrimonio (de momento) desfilar por diferentes alfombras rojas: las aledañas y la oficial de los Premios Óscar.Jennifer ha roto su silencio nueve meses después de su separación (que no divorcio) y ha hablado maravillas de su ex, en lo que muchos han denominado como la posible antesala a la reconciliación. Tan sorprendentes han sido sus palabras que Jennifer saca de la fórmula a la polémica niñera que muchos calificaron como la causante del desastre: “Ya estábamos separados meses antes de que hablara la niñera. Ella no fue parte de la ecuación”. Por si esto fuera poco, Garner apela a su ex como único conocedor de la realidad: “Él es la única persona que realmente sabe toda la verdad de las cosas y yo sigo siendo quién conoce algunas de las verdades”.
Justifique o no a Ben, Jennifer deja muy bien parado al padre de sus hijos a pesar de lo doloroso de la situación que vivieron: “Nadie debería odiarle por mí. Yo de no le odio. Él es el amor de mi vida, ¿qué puedo hacer al respecto? Es la persona más brillante en cualquier estancia, el más carismático y el más generoso.”En tan cariñoso discurso, la actriz no deja ningún cabo suelto, incluso cuando habla de su futuro con el que ha sido su marido: “Obviamente no sueño con bailar con mi marido en la boda de mi hija. Pero hay que ver sus caras cuando entra por la puerta. Cuando uno ve a sus hijos querer a alguien de forma tan pura e incondicional, cualquiera intentaría ser amigo de esa persona”. Una afirmación tan fuerte que algunos medios internacionales no han podido evitar dejar caer la posibilidad de una posible reconciliación. Algo que ella no parece estar barajando por el momento: “Mi matrimonio fue de verdad. No era para las cámaras, sin embargo, no funcionó”.
