Giorgio Armani nació en Emilia-Romagna: comenzó a trabajar en los grandes almacenes La Rinascente, para los que diseñaba la decoración de sus escaparates. Su talento y creatividad dieron sus frutos al convertirse en el diseñador de la firma Nino Cerruti entre 1961 y 1970. Será en 1974 cuando funde la sociedad Armani junto a su socio, Sergio Galeotti, naciendo la casa como una marca eminentemente masculina. Un año después, sin embargo, amplía su confección al mercado de la mujer.
Giorgio Armani no diseña modelos estridentes, sino que sabe modular su creatividad y originalidad hasta crear diseños sobrios pero actuales, modernos pero nunca rompedores. Las líneas rectas son una de las señas de identidad de la casa, así como las gamas cromáticas que huyen de las estridencias. La firma se ha ganado la etiqueta de elegante por haber sabido permanecer firme a sus convicciones y a ese elegancia contenida que ha de perdurar pese al riesgo que otras marcas emprenden en sus colecciones. Es por ello por lo que Armani Privé es una de las firmas preferidas sobre la alfombra roja, siendo Giorgio Armani uno de los diseñadores fetiches de Hollywood a raíz del diseño de los trajes de Richard Gere para American Gigoló.
El estilismo de Phenomena, de Dario Argento, también corrió a su cargo. Una de las líneas principales de Giorgio Armani es Emporio Armani, que cobija bajo su nombre gafas de sol, perfumes, accesorios, relojes y colecciones ready-to-wear. El público más joven es el que se siente más atraído por esta firma, una línea puente entre Armani Exchange o Armani Jeans y Armani Collezioni o Giorgio Armani 'etiqueta negra', líneas de la misma casa cuya diferencia reside en los precios. Este gusto por la juventud ha llevado al diseñador a apostar por celebrities como imagen de sus campañas: Beyoncé pone rostro a su perfume Diamonds, mientras que Victoria y David Beckham o Nadal posaron para su línea de lencería.
