Ay, el amor. ¿Quién no ha sufrido alguna vez por una ruptura amorosa? Finalizar y dar por terminada una relación -ya sea por tu propia voluntad o sin que tu quieras- es un trance doloroso, y un episodio muy difícil en la vida de cualquier persona. Decir adiós a tu pareja -por las buenas o por las malas- es un momento que muchas personas viven como un duelo, y es que el desamor se vive, al fin y al cabo, como la pérdida (o la muerte) de un ser querido. Sobre todo si la relación era larga y ya teníais una vida en común...
Cuando el amor se termina entramos, queramos o no, en un proceso de separación largo y duro, en el que sentimientos como el rencor, el dolor, los celos o el odio pueden bloquearte mentalmente y hacerte hacer -valga la redundancia- cosas que realmente no querrías, impropias de ti. Tras una ruptura los niveles de serotonina -la hormona de la felicidad y del amor- están en su punto más bajo, y esto puede hacer que no pienses con claridad y que cometas errores básicos con lo que lo único que conseguirás será que el duelo se eternice y la ruptura te duela más todavía.
¿Qué hacer, entonces, si te han roto el corazón o has tenido que poner fin a una relación? Después de aceptar la ruptura y finalmente aceptarla, es fundamental que no caigas en algunos hábitos dañinos que te impedirán seguir con tu vida. Ya sabes: mantener el contacto con tu ex, conservar todas sus cosas, buscar un reemplazo emocional rápidamente, buscar culpables o martirizarte pensando que ha sido tu culpa, intentar inmiscuirte en su nueva vida, recurrir al alcohol y otros malos hábitos para olvidar el dolor...
Estas son las 10 cosas que tienes que evitar a toda costa después de una ruptura amorosa. Toma nota de todas ellas y grábalas en tu mente a fuego: si alguna vez las necesitas, ya nos lo agradecerás más adelante, cuando hayas superado el mal trance y veas que aquello no era el fin del mundo.
Mantener el contacto con tu ex
Si te han dejado o te han hecho daño, no tienes ninguna necesidad de tener contacto con tu ex. No sufrirás menos si te despides 'poco a poco' de la que era tu pareja o mantienes su contacto: mejor que cortes toda relación con él y ella y lo olvides cuanto antes.

Buscar culpables
No te obsesiones buscando culpables fuera de tu relación o dejando que te invadan los celos. El resentimiento puede ser tu peor enemigo.

Pensar una posible vuelta
Pensar que tu ex va a volver o que vuestra ruptura se va a solucionar con el tiempo solo te hará poner tu vida en espera y frenarte en tu 'recuperación'. Vive el presente y no idealices el futuro.

Guardar las cosas de tu ex
Nada de conservar objetos, ni ropa, ni fotos, ni regalos... Cuanto más tiempo pases con las pertenencias de tu expareja, más tardarás en recuperarte. ¡Devuélveselas!

Iniciar otra relación
¡Error! No busques apoyo emocional en otra persona ni empieces una relación por despecho. No te llevará a ningún lado. Date tiempo para estar sola.

Sexo desenfrenado
No busques, tampoco, rollos de una noche ni sexo desenfrenado ahora que vuelves a estar soltera. Esto solo te hará sentirte más vacía, como un objeto, y te terminarás hundiendo todavía más.

Volverte una paranoica
No empieces a actuar como una espía ni a inmiscuirte en la vida de tu ex. Deja que viva su vida y no estés pendiente de lo que hace.

Beber, fumar y otros hábitos
No pasa nada porque te termines un tarro entero de helado o porque te bebas una botella de vino de vez en cuando... pero intenta no abusar de malos hábitos como la comida basura, el alcohol u otras drogas. Te harán sentir bien durante unos minutos, pero después, el bajón será aun mayor.

Martirizarte
No te eches la culpa por lo que ha pasado ni te martirices pensando que podías haber hecho las cosas de otra forma. ¡Cabeza alta!

No relativizar
Sí, es duro... pero intenta relativizar las cosas. Puede que el fin de esta relación suponga el principio de otra, o que la ruptura haya sido por tu bien. Ahora mismo no ves la luz al final del tunel, pero dentro de un tiempo te darás cuenta de lo mal que lo pasaste sin necesidad.
