Las fragancias florales son como las prendas del un fondo de armario bien estructurado: hay una para cada día, cada estado de ánimo y cada estación del año. Desde los ramilletes más inocentes y discretos hasta los bouquets más sofisticados e intensos, este tipo de perfumes nunca pasa de moda. Una de sus mejores bazas es su capacidad camaleónica: se adaptan a una comida informal al sol tanto como a una cena elegante. Y no, no todos huelen a jardín clásico ni a ramo de flores recién cortado. Por suerte para las más intrépidas, existen perfumes florales nada típicos, con un twist irreverente, vibrante y sorprendente.
Las mil caras del universo floral dentro de un perfume
Delina de Pafums de Marly: una rosa con actitud
Dentro de este abanico de aromas protagonizados por flores, Delina de Parfums de Marly se ha convertido en un verdadero objeto de deseo. No es una rosa más: es una rosa que se desmarca, con personalidad, con ese je ne sais quoi que la hace inolvidable. Nacida del talento del perfumista Quentin Bisch en 2017, esta fragancia nicho ha conquistado a las devotas del floral menos aburrido. Tiene ese aura de elegancia effortless, como quien se marca un lookazo increíble sin esforzarse demasiado. Pese a pertenecer al mundo exclusivo de la perfumería nicho, su popularidad ha cruzado fronteras y es una de las grandes estrellas en redes sociales. Una rosa contemporánea, vibrante, con chispa.
Un cóctel floral con matices inesperados
¿A qué huele Delina? Su salida es jugosa y exótica gracias a la presencia de lichi,que se mezcla con el ruibarbo y la bergamota en un incio fresco, ligeramente ácido y con un punto especiado propio de la nuez moscada. Posteriormente, aterriza el corazón floral donde la rosa turca es la reina absoluta, pero no está sola: la acompaña la peonía, la vainilla y un toque limpio de almizcle que recuerda a sábanas recién cambiadas. En el fondo, se asientan las maderas nobles, el incienso y un vetiver de Haití que redondea todo con una sensualidad elegante, sin estridencias. Un verdadero ejemplo de cómo los perfumes frescos con alma de lino blanco recién planchado pueden tener matices florales clásicos.

Eso sí, su historia no se detiene ahí: la familia Delina ha crecido con tres flankers que reinterpretan la fórmula desde distintos ángulos. Delina Exclusif es más intensa, con notas orientales y afrutadas; Delina La Rosée es una versión acuática, etérea y aún más limpia; mientras que Delina Limited Edition juega con una edición especial más rica y aterciopelada. Formas distintas entender la mirada contemporánea de la rosa a través de fragancias que comparten el mismo hilo conductor.
Qué opinan los compradores de este perfume
Más allá de su auge en redes sociales, los fanáticos de Delina no dudan en escribir cartas de amor a este perfume en webs como Fragrantica. "Huele cuando vas al jardín que tienes en tu casa y cortas una rosa con todo y hoja", afirma un usuario. "La idea platónica de esa feminidad universal construida a base de mermeladas de frutos rojos ricos, dulces y luminosos. Evoca infancia, juguetes, inocencia y belleza clásicamente femenina en un equilibrio finísimo y elegante", subraya otro amante de la perfumería. Al fin y al cabo, el arte del perfume es tan personal como el de la literatura o la pintura. El precio de Delina es de 270 euros por 75 ml.
Otras fragancias en las que brilla una rosa poco común
Rose Struck: un floral minimalista con matcha

Si Delina es un vestido de seda con vuelo, Rose Struck de Liis es una camisa blanca de algodón impecable, de esas que siempre quedan bien. Este perfume californiano tiene una estética limpia, nada recargada. Las notas de salida de cassis y mandarina aportan una energía cítrica y luminosa, como una mañana de primavera. El corazón sorprende con un inesperado té matcha, que le da un matiz herbáceo, verde y relajado. En el fondo, la rosa Damasco y la rosa Centifolia se funden en una estela serena, elegante, cero empalagosa. Precio: 165 euros en All Yours.
Rose Prick: la rosa más punk

Cerramos el trío con una rosa afilada, directa y provocadora: Rose Prick de Tom Ford. Como su nombre indica, esta no es una rosa amable. Es intensa, picante y con carácter. Desde la salida, la pimienta de Sichuan y la cúrcuma marcan un inicio especiado, incluso un poco rebelde. En el corazón, una mezcla voluptuosa de rosa de mayo, rosa de Bulgaria y rosa turca crea una sensación rica, carnal y embriagadora. Finalmente, el pachulí y el haba tonka del fondo aportan calidez y profundidad, dejando una marca poderosa, con peso. Precio: 215 euros en Sephora.