En un mundo en el que las tendencias cambian a la velocidad de un clic, hay marcas que resisten al paso del tiempo no solo por nostalgia, sino por seguir siendo relevantes. Y esta firma de belleza lo ha conseguido durante más de un siglo. En 2025 cumple 135 años de historia y, lejos de ser una marca del pasado, se mantiene como un nombre imprescindible en el cuidado de la piel de millones de mujeres en España.
Desde su nacimiento en 1890 en Aurora, Illinois (EE. UU.), esta firma ha estado presente en los tocadores familiares, transmitiéndose de generación en generación como un símbolo de confianza. Su llegada a España en 1914 marcó el inicio de una historia de amor entre la marca y las mujeres españolas, que la acogieron como parte de su rutina de belleza mucho antes de que la cosmética se convirtiera en industria.
Una historia que se ha vivido (y olido) en casas de toda España
Durante las décadas de los años 30 y 40, su presencia en las radios españolas era constante. “Para salud, belleza y lozanía, cada día”, decía el jingle que muchas abuelas aún recuerdan. La marca se consolidó como un clásico: estaba en los anuncios de los tranvías, en los escaparates de las farmacias y en los neceseres heredados de madres a hijas.
Pero esta historia no se ha quedado en el recuerdo. En 2025, la firma ha sido reconocida por Kantar BrandZ como una de las marcas promesa de España, gracias a su conexión emocional con los consumidores y su capacidad para evolucionar sin perder su esencia. Hoy, lidera el sector de tratamientos despigmentantes y es la segunda marca con más presencia en perfumerías, según datos de Nielsen.
Ciencia, pigmentación y un compromiso con la piel
Lo que muchas mujeres recuerdan como una crema clásica, ha evolucionado en los últimos años hacia un enfoque científico e innovador, con tecnologías patentadas como B-CORE 221™, y líneas como Repigment, desarrolladas junto a dermatólogos expertos para tratar manchas blancas y otros problemas de pigmentación.
En plena pandemia, la marca incluso lanzó un servicio de asesoramiento telemático personalizado, que hoy es una de sus señas de identidad y que refuerza el vínculo cercano con cada usuaria. Además, ha impulsado la celebración del Día Mundial de las Manchas Cutáneas, posicionándose como una marca comprometida con la salud y la visibilidad de las pieles reales.
Hay firmas que traspasan la etiqueta para convertirse en algo más. Esta, con 135 años a sus espaldas, es uno de esos nombres que huelen a infancia, a primeros cuidados, a rutina compartida entre generaciones. Y, a la vez, es sinónimo de innovación, ciencia y compromiso con la piel.
Una prueba de que la belleza más auténtica no siempre nace de lo nuevo, sino de lo que sabe mantenerse fiel a quienes confían en ella.
Yo misma soy fan de una de sus rutinas más eficaces: la específica para manchas hormonales. La he usado en varias etapas de mi vida y siempre me ha funcionado. Especial mención merece su protector solar, que me parece de lo mejor que he probado: ligero, nada graso y con alta protección. Es de esos productos que siempre repito porque sé que me funciona.
Y es que si hay algo por lo que esta firma es conocida, es por su efectividad frente a las manchas. No hace falta ni decir el nombre: cuando alguien menciona una crema para tratar hiperpigmentaciones, esta marca es la unas de las primeras en la que se piensa. Ha construido su reputación durante décadas y sigue siendo un referente en despigmentación, tanto por sus fórmulas como por el conocimiento profundo que tiene del tema. Es una de esas marcas que inspiran confianza real, más allá de las modas.
El boom de las marcas con alma: tradición vs. nueva generación
Hoy, esta firma histórica convive en el mercado con una nueva ola de marcas que también están revolucionando el sector beauty. Desde proyectos independientes a grandes nombres vinculados al mundo del entretenimiento, la cosmética actual es un reflejo de las distintas formas de entender el cuidado personal.
8 famosas que han lanzado sus propias marcas de belleza ¡y han triunfado!, como Rihanna con Fenty Beauty, Selena Gomez con Rare Beauty o Hailey Bieber con Rhode, han sabido conectar con una nueva generación de consumidoras. Marcas de cosmética millennial que crean adicción, como Glossier, Typology o Krave Beauty, triunfan con fórmulas limpias, packaging minimalista y un enfoque digital-first. Y las marcas de cosméticos de las influencers que están arrasando (y que querrás probar), como Naked & Thriving, Gisou o The Glow Filter, completan un panorama en el que la innovación ya no solo viene de los laboratorios, sino también de los perfiles virales.
