El sol es beneficioso para la salud, pero si no tenemos cuidado puede ser muy perjudicial, sobre todo para nuestra piel. Utilizar protector solar es imprescindible a cualquier edad y, aunque pensemos lo contrario, para cualquier tipo de piel. Según el tipo de piel de cada una y la facilidad que tengamos para tomar color o el riesgo de quemarnos, debemos elegir entre los diferentes tipos de protectores solares que hay en el mercado, ya que el factor de protección no es el mismo en todos y es determinante para cuidar la piel.
Factores de protección y tipos de piel
-Piel muy blanca con tendencia a quemarse con facilidad: el factor de protección adecuado está entre 20 y 30. Este tipo de piel se quema con el sol y casi nunca toma color bronceado. -Piel blanca, sufre quemaduras con facilidad y toma poco color: Un protector solar de factor entre 12 y 30 es lo aconsejable. -Piel que se broncea de manera gradual y se quema de forma moderada: el factor de protección más adecuado es entre 8 y 12. -Piel con quemaduras mínimas y que se broncea fácilmente: opta por un protector solar con factor de protección entre 4 y 8. -Piel morena, que no se quema y se broncea sin problemas: un factor entre 2 y 4 es suficiente. Sea cual sea nuestro fototipo de piel, utilizar cremas solares es necesario. No te confíes: la acción del sol puede ser muy agresiva con nuestra piel y causar quemaduras, lesiones e, incluso, derivar en enfermedades más graves como el cáncer de piel. ¿Sabes cómo utilizar correctamente un protector solar? Te lo contamos en nuestra galería.