El día de hoy marca oficialmente el inicio del verano. Es cierto, llevamos semanas con temperaturas que ya rozaban los cuarenta grados y las terrazas llenas. Pero ahora sí que sí: no hay vuelta atrás. Es el momento de actualizar el tocador y dejar atrás los perfumes profundos e intensos que han acompañado los meses fríos. El verano pide otra banda sonora olfativa: perfumes cítricos y frescos que huelen a limpio, ligeros y vibrantes que combinan de infarto con un vestido blanco de lino y unas sandalias planas.
Eso sí, no hablamos de cualquier colonia ligera: las colonias frescas de mujer que son un éxito desde hace años suelen ser eau de toilette, con fórmulas pensadas para disfrutar de un delicioso aroma sin saturar. Las notas protagonistas son los cítricos, como bergamota, limón o mandarina, las flores blancas y los toques verdes y aromáticos. Una mezcla que levanta el ánimo y refresca mientras esperamos el momento de poner el out of the office en el mail.
Colonias que tienen un lugar especial en el fondo de armario olfativo de verano
Escale à Portofino de Dior
Entre las fanáticas de las colonias cítricas más frescas y aromáticas, Escale à Portofino es una joya que nunca falla. Este eau de toilette (103 euros por 75 ml) traslada en un segundo a la Riviera italiana. ¿La clave de su éxito? Una selección de materias primas mediterráneas de primera calidad que dan vida a una fragancia fresca y aromática absolutamente luminosa.

La salida cítrica brilla gracias a la bergamota de Calabria y la cidra italiana, aportando un frescor chispeante. El corazón combina el dulzor de la almendra amarga con la delicadeza floral del azahar, mientras que el ciprés añade un matiz verde y elegante. El resultado es sofisticado y veraniego sin caer en lo previsible. El frasco art déco completa la experiencia, convirtiendo Escale à Portofino en un imprescindible del neceser estival de cualquier beauty lover.
Calèche Eau de toilette de Hermès
Nada que ver con las colonias típicas: Calèche es uno de esos perfumes cítricos nada típicos para las que adoran las fragancias frescas, limpias y elegantes. Creada en 1961 por Guy Robert, esta composición floral amaderada chypre (160 euros por 100 ml) mantiene intacto su magnetismo.

El inicio cítrico y vibrante combina aldehídos, ciprés, bergamota y limón con el toque floral del neroli y el azahar. El corazón floral despliega iris, rosa, jazmín, gardenia y ylang-ylang, bordado como una pieza de alta costura. La estela amaderada y chiprada con musgo de roble, vetiver y haba tonka aporta carácter sin pesar en verano. En realidad, Calèche representa la elegancia atemporal con un giro ligero que encaja de maravilla en los días cálidos. Un perfume con historia para las amantes de la perfumería que aprecian los clásicos reinterpretados.
Aqua Allegoria Mandarine Basilic de Guerlain
Si existe una fragancia que resume la alegría veraniega, es Aqua Allegoria Mandarine Basilic (103 euros por 75 ml). Desde su lanzamiento en 2007, esta composición ha conquistado a beauty lovers de todo el mundo. La frescura cítrica de mandarina, clementina y naranja amarga se mezcla con el verde vibrante del té y la hiedra, aportando energía y dinamismo. El corazón sorprende con notas de albahaca, manzanilla y peonía, un guiño herbal que refresca y aporta naturalidad. El fondo de sándalo y ámbar redondea la fragancia sin restarle ligereza.

Mandarine Basilic es un soplo de aire puro para quienes desean perfumes cítricos y frescos que huelen a limpio, con un punto inesperado, ya que la mandarina no es una nota tan habitual como la bergamota o el limón. Además, su frasco de abeja dorada es ya un icono sin fecha de caducidad.