La categoría floral no solo resiste el paso del tiempo, sino que cada primavera-verano resurge con nuevas interpretaciones que conquistan tanto a las nostálgicas como a las más atrevidas. Esta temporada, las tendencias olfativas apuntan hacia una feminidad menos ingenua y más provocadora, con perfumes florales nada típicos que merece la pena probar esta primavera. Entre lirios marinos, jazmines cremosos y tuberosas voluptuosas, las fragancias se enriquecen con notas inesperadas (como la sal, el cuero o el ron) que aportan carácter y profundidad a lo que, a primera vista, podría parecer simplemente romántico.
El nardo, esa flor blanca de aroma narcótico y textura láctea, vuelve a ser protagonista, pero con giros inesperados. Mezclado con acordes salinos, toques especiados o notas gourmand, se convierte en el corazón de perfumes florales que desearás estrenar (o redescubrir). Dentro de esta corriente renovadora, hay una casa de moda que siempre ha sabido romper las reglas con elegancia: Jean Paul Gaultier. Icono de irreverencia y sensualidad, sus perfumes se han convertido en piezas de deseo para cualquier fragrance lover que se precie.
Jean Paul Gaultier, un aroma que susurra elegancia y rebeldía
Una historia tan apasionante como rompedora
Desde sus inicios en 1976, Jean Paul Gaultier ha desafiado los códigos establecidos de la moda con un estilo inclusivo, atrevido y profundamente creativo. Sin formación académica en diseño, se convirtió en uno de los grandes couturiers del mundo, vistiendo a leyendas como Madonna o Kylie Minogue, y colaborando con cineastas como Pedro Almodóvar. En 1993, su rebeldía estética se tradujo en aroma: Classique fue su primera fragancia, un cóctel de flor de azahar, jengibre y vainilla, embotellado en ese mítico torso femenino que ya es historia del perfume. Le siguieron Le Male, Scandal, La Belle, Le Beau y muchas más, todas con el sello Gaultier: sensuales, provocadoras y, por qué no decirlo, adictivas.
De hecho, Gaultier no lanza perfumes, lanza declaraciones olfativas. Sus colaboraciones con narices de la talla de Francis Kurkdjian, Daphné Bugey o Quentin Bisch han dado lugar a verdaderas joyas contemporáneas. Las últimas incorporaciones a su universo olfativo siguen esa línea transgresora y seductora, con lanzamientos como Scandal Le Parfum o Ultra Male, que seducen por su intensidad.
Gaultier Divine Elixir, un floral sensual y salado
El nuevo Gaultier Divine Elixir llega para elevar la colección Divine a otro nivel. Lanzado en 2025, este perfume es una reinterpretación más cálida y profunda de su predecesor Divine (2023), que ya sorprendía por su mezcla de lirio blanco, brisa marina y meringue. Esta vez, el toque salado es protagonista desde el primer instante: una apertura vibrante y casi adictiva que captura la frescura del mar, pero sin caer en lo típicamente acuático o lo ozónico.

En el corazón, el nardo despliega toda su voluptuosidad. Lejos de ser empolvado o empalagoso, se muestra cremoso, envolvente y ligeramente especiado. La combinación con el acorde salino genera una sensación cálida, como la piel mojada bajo el sol. La base de tonka bean aporta redondez y un dulzor sutil, ideal para quien busca la mejor fragancia para una noche inolvidable, sin renunciar al sello floral. Firmado por Quentin Bisch, este perfume está hecho para las narices más exigentes.
Otros perfumes florales de diseñador que destacan por su elegancia
Jil Sander Nº4 Eau de Parfum

Quienes valoran la discreción con carácter encontrarán en Jil Sander Nº4 una aliada impecable. Esta fragancia, a menudo subestimada, es una joya escondida en el universo floral. Su apertura sorprende con una mezcla jugosa y chispeante de melocotón, geranio y ciruela, adornada con un punto de anís que le da un giro inesperado. El corazón floral es exuberante: rosa, violeta, jazmín, heliotropo y nardo, en un bouquet que rebosa elegancia. Eso sí, lo que realmente distingue a esta composición es su fondo complejo y profundo, donde conviven ámbar, pachulí, almizcle y un toque de civeta que le aporta sensualidad vintage. El precio es de 34,90 euros en Notino.
Prada Paradoxe Virtual Flower

Para las que buscan una experiencia más futurista sin renunciar al alma floral, Paradoxe Virtual Flower de Prada es una propuesta irresistible. Esta fragancia fusiona tecnología y naturaleza con una ligereza sofisticada que la hace perfecta para el día a día. Sus notas iniciales combinan cítricos brillantes y toques verdes que despiertan los sentidos desde la primera pulverización. La flor protagonista, una rosa moderna con matices afrutados, aparece acompañada de peonía y almizcle blanco, generando una estela suave pero persistente. El precio es de 160 euros.