Debo admitir que el bombazo de la IA me da cierto miedo. De algún modo, siento en unos años las máquinas nos ganarán la partida a los humanos, pero reconozco que es muy complicado dejar a un lado la curiosidad y no tentar a la suerte. El fenómeno de los perfumes personalizados no es una novedad, eso lo sabemos todas, pero hay algo profundamente inusual en que el proceso lo haga un robot y no una mente pensante. Por supuesto, para mí nada reemplaza el trabajo de un maestro perfumista, pese a que la IA ha logrado sorprenderme.
Una de las magias del universo olfativo es comprobar cómo un perfumista crea una obra de arte capaz de enamorarte. Quizá, aquella nota que no acaba de encajar contigo de golpe te apasiona. En el caso de XIA Perfumes no hay espacio para el riesgo, ya que una misma es la que decide qué ingredientes son los que formarán parte de la fragancia final.
Cómo personalizar tu perfume
Qué ofrece la IA
De forma rápida e intuitiva, te enfrentas a un test en el que hay preguntas que van desde tu música favorita hasta qué conceptos crees que definen tu personalidad. De este modo, la máquina puede ir perfilando tus gustos, pero el plato fuerte aparece en el momento de probar las notas disponibles. Tras afinar tus preferencias con palabras, toca poner en marcha la nariz. Este paso resulta muy interesante, sobre todo, para todas aquellas que no tengan muy claro qué tipo de notas son las que prefieren, dado que las puedes degustar en solitario, sin interferencias.
El perfume final es un punto medio entre aquello que desprende tu personalidad y lo que adora tu olfato. En mi caso, Dark Leather (este es el nombre que escogí para mi creación) es una fusión de resinas, especias, cuero, ámbar, café, tabaco y vaina de vainilla. Algo así como pasear por el mercado árabe bien entrada la noche. En pocas palabras, el que describo como perfume más elegante del otoño. A mi parecer, es una experiencia singular y el perfume, como era de esperar, huele a mí. El precio es de 60 euros y la dirección es calle de Carretas, 5.
Otras opciones para una fragancia hecha para ti
La personalización va mucho más allá de la IA y en nuestro país existen templos donde manos expertas elaboran tu aroma. Por ejemplo, Andreas Skevoulis es el fundador de Nectárion Parfum, un servicio de perfumería personalizada situado en Madrid que ofrece una cita con ese plus que tiene lo físico. Si prefieres quedarte en casa, otra opción es Pressentia, que tras un cuestionario para conocer tu carácter y tus preferencias, da vida a una fragancia única, el precio es de 79 euros por 30 ml.
