En las bodas existen tradiciones arraigadas que se han ido repitiendo enlace tras enlace y se han convertido en elementos fundamentales que no fallan en estos eventos de unión. Hay algunos relacionados con la ceremonia, como el intercambio de arras, otras con los novios, como que no se vean antes de llegar al altar y otras muy divertidas como es la salida de los recién casados mientras los invitados tiran arroz para dar buena suerte a la pareja. No obstante, las tradiciones más conocidas son aquellas relacionadas con la moda. ¿Sabes cuáles son?
La primera tradición indiscutible es que la novia luzca un vestido blanco como traje nupcial. Se trata de una costumbre que se remonta al siglo XIX, en la boda de la Reina Victoria de Inglaterra, que decidió lucir un vestido de color blanco con encajes en crema para contraer matrimonio con el príncipe Alberto de Saxe-Coburgo. Y para resaltar sobre los demás, prohibió a los asistentes a la ceremonia que lucieran un estilismo de esa tonalidad, creando sin querer, otra tradición que se mantiene hasta hoy en día.
Otra práctica que suele llevar la novia a cabo tiene que ver con el proverbio de "Algo nuevo, algo prestado y algo azul", es decir, que debe lucir algo que haya adquirido recientemente y que esté sin estrenar, algo que le haya dejado alguien y finalmente un objeto de color azulado. Se trata de una costumbre que relaciona dichos objetos a la novia con su futuro -algo nuevo-, su pasado -algo prestado- y su felicidad -algo azul-.
Finalmente, la tradición fashionista de la que vamos a hablar hoy es la de los velos, una práctica que se lleva a cabo en el dress code de las bodas. El velo es un complemento que suele lucir la novia durante la ceremonia, bien como adorno del peinado, bien cubriéndole el rostro, y tiene varios significados. En la época griega comenzaron a usarlo para proteger a la novia de los males de ojo, mientras que en la tradición cristiana, este accesorio simboliza la pureza de la unión.
Se trata de un elemento clásico que forma parte del outfit de la novia, pero a día de hoy, no es imprescindible lucirlo. De hecho, puedes optar por un tocado de novia en lugar de ello. No obstante, si no quieres dejar de lado esta tradición y quieres lucir este complemento nupcial, descubre todas los modelos de velos y las formas en las que lo puedes colocar: desde el estilo clásico, hasta uno vanguardista, sin dejar de lado los más bohemios. ¿Cuál es tu favorito?
En el recogido
Tradicional y sencillo, esta es una de las formas más comunes de lucir el velo.

Con casquete
Si quieres destacar y hacerlo tuyo, apuesta por un casquete hecho a medida como Elisa García Faya para lucir el velo de forma diferente.

Sobre el rostro
Clásico, tradicional y muy romántico, así queda el velo transparente sobre el rostro.

En un sombrero
Las bodas han cambiado mucho con la pandemia y así se han adaptado los estilismos nupciales. Pero si no quieres renunciar al velo, toma nota de cómo lo lleva esta novia, con una rejilla en un sombrero.

Cubriendo el peinado
Cubriendo el peinado pero dejando el rostro al descubierto, así lo luce esta novia con un velo diseñado por The Muse Collective.

Junto a una tiara
Muy al estilo royal, el velo también puede sujetarse con una tiara, como ya hizo la influencer Rocío Osorno.

En un lazo
Único y especial, esta novia se queda con el velo atado en forma de lazo, a modo de tocado nupcial.

Con un tocado floral
En un estilismo clásico bridal como el de Miranda Kerr, no puede faltar el velo. La modelo apuesta por sujetarlo con una corona de flores de color blanco.

Con perlas
Si has apostado por un vestido de novia minimalista y quieres dar un toque extra con tu velo, ficha este modelo de The Muse Colletive con perlas engastadas.

Mantilla
No hay nada más bohemio... El velo a modo de mantilla es una elección boho chic que no falla.
