En mayo del 2017 le daba el sí a Marta Castro en su adorada Ibiza en una original y divertida fiesta en la que la novia utilizó diez ramos para repartir entre sus invitadas y en la que no faltó, como invitado honorífico, un cachorro de perro presenciando la ceremonia. Marta y Fonsi sellaban así cuatro años de feliz noviazgo que le habían devuelto la estabilidad al DJ. Desde su separación de Alba Carrillo, con la que tuvo a su hijo Lucas pero con la que nunca llegó a casarse, no había encontrado una pareja estable con la que plantearse un futuro a largo plazo. Ahora, ese plazo ha llegado a su fin.Dos meses antes de cumplir su quinto aniversario de boda, el matrimonio ha decidido emprender caminos separados. Era la propia Marta Castro la que lo confirmaba en su perfil de Instagram después de que el digital Hola.com adelantase la noticia. “Después de más de nueve años de respeto y amor, tanto Fonsi como yo os anunciamos nuestra separación. Se trata de una decisión tomada de mutuo acuerdo, desde ese mismo respeto y amor con el que formamos nuestra familia. Nuestros caminos se separan pero el amor hacia lo más importante, nuestro hijo, nos mantendrá unidos”. El pequeño Hugo, nacido el 29 de octubre de 2020, es el segundo hijo para el ex piloto y el primero para Marta.
De su relación con Alba Carrillo nació su primer hijo Lucas, en octubre de 2011. Alba y Fonsi habían tenido una intensa relación sentimental que duró poco más de dos años pero que tuvo un final difícil de encajar para la modelo y ahora colaboradora de televisión. Eran los años más “locos” de Nieto. Al poco de comenzar su relación con Alba, Fonsi se retiró del motociclismo y dio la bienvenida a su vida a la música haciéndose DJ, lo que supuso una transición vital que no encajaba con la llegada al mundo de un bebé. La pareja terminó rompiéndose sin haber formalizado la relación. El final fue tormentoso y les llevó a ambos los tribunales para resolver la custodia de su hijo en común. Fonsi ya había empezado entonces su relación con Marta Castro, que fue un apoyo fundamental para superar el trance. Tras conseguir la custodia compartida de su hijo, logró también estabilizar su relación con la madre del pequeño, con la que en la actualidad tiene una relación excelente.
Alba Carrillo y Marta Castro son las madres de sus dos hijos, pero no han sido las únicas mujeres que han dejado huella en su vida. Retrocediendo al comienzo de sus andanzas amorosas, hay que remontarse a 1999 para arrancar su noviazgo con la actriz Elsa Pataky. Para ambos, fue la primera relación conocida. Estuvieron juntos cinco años en los que, incluso, estrenaron casa común. Elsa vivía con pasión el mundo de las motos al que se dedicaba Fonsi y eran dos enamorados que empezaban al vivir el éxito profesional en sus respectivas carreras. Demasiado jóvenes para casarse, fue Ariadne Artiles, su siguiente pareja, la que le despertó las ganas de matrimonio. El 27 de junio de 2005, poco antes de cumplir los 27 años, Fonsi Nieto protagonizaba su primera boda junto a la modelo canaria. En el momento dorado de su carrera en el motociclismo, el sobrino de Angel Nieto escogía ya por entonces la isla de Ibiza para casarse. Allí, precisamente, había conocido a la mujer con la que se estaba comprometiendo de por vida una noche de verano y, ahí, estaban los mejores recuerdos de su familia, amante de la isla de que Angel Nieto cayó rendido a sus encantos décadas atrás.
La iglesia de San Miguel fue el escenario de la ceremonia religiosa y el Hotel Azzaro el lugar donde la pareja celebró su gran día junto a sus 400 invitados. Los nervios por proteger la imagen de los novios, vendida en exclusiva a la revista Hola, llevaron a protagonizar tensos momentos con la prensa que quería dar fe del evento. Fornidos guardaespaldas, sábanas blancas extendidas para tapar los accesos y alguna que otra salida de tono fruto de los nervios del momento por salvaguardar el reportaje de la boda de objetivos no autorizados acapararon el protagonismo mediático aquella tarde de octubre. Las páginas de la revista Hola mostraron días después a la radiante novia, vestida con un diseño de encaje romántico de Manuel Mota y una mantilla colocada a modo de pañuelo pirata que destacaba su belleza.
Antes de celebrar su tercer aniversario de boda, la pareja confirmó su separación mediante un comunicado. Ariadne ya pasaba más tiempo en Nueva York que en España y las vidas de ambos se habían alejado demasiado. Llegó poco después a la vida del piloto una compañera de profesión, la también piloto Carmen Jordá, con la que, tras un año de discreto noviazgo, finalizó su relación de la misma forma silenciosa de la que lo habían comenzado.
