Tras el susto sufrido hace unos días, Kim Kardashian está cada vez más cerca de atrapar a los ladrones que irrumpieron en su lujoso apartamento y robaron sus joyas, ya que una cámara de circuito cerrado de televisión captó su reflejo en un espejo durante su escapada.

La policía de París confiscó el martes por la mañana el material captado desde el salón de manicura Bel Ange próximo al apartamento de Kim, según ha publicado el diario The Sun. Una cámara dentro del establecimiento situada frente a un gran espejo obtuvo una imagen clara de los ladrones cuando huían.

La dueña del salón ha declarado al portal de noticias TMZ que ellos no entregaron ningún vídeo a la policía, y que el material podría ser de otra tienda próxima en la zona comercial. Al parecer, la prensa europea ha informado de que una segunda cámara captó a los ladrones mientras salían por una puerta trasera abierta al pasillo de un aparcamiento. Según los informes, la policía ha reunido pruebas - incluyendo colillas de cigarros – a las que van a realizar pruebas de ADN, partiendo del supuesto de que los ladrones estén fichados y se puedan contrastar sus muestras.
No obstante, no hay constancia de imágenes de vigilancia del interior del apartamento de Kim. Por su parte, los investigadores están comprobando los registros telefónicos de varias personas relacionadas con la ‘celebritie’ y ya existe larga lista de sospechosos que podrían haber filtrado información, pues sus asaltantes conocían el momento exacto en el que la estrella se encontraba sola.