Apenas un mes después de ser mamá, Alma Cortés ha querido abrirse con sus seguidores y dar su opinión sobre el estado de alarma al que se enfrenta España. Ha grabado una serie de ‘historias’ en Instagram, mientras hacía la cena, en las que ha comentado con todo detalle todo lo que está pasando desde que se declarase la pandemia del coronavirus.
La hija de Raquel Bollo siente indignación con todo lo que estamos viviendo, porque considera que le están tomando el pelo y tratándola como tonta. No solo a ella, sino a todos los ciudadanos. Justifica que tenemos constancia de este virus sobre febrero, pero que el gobierno de España lo sabía hace mucho más tiempo porque había surgido primero en China y después se expandió a Italia. Por ello subraya que España debería haberlo previsto y prevenido, cosa que su a parecer no ha hecho. Ella, personalmente, está preocupada por su pequeña Jimena, de apenas un mes, y por las personas mayores que la rodean y son grupo de riesgo.
Añade que hasta este lunes, inclusive, seguían abiertas vías aéreas y terrestres, por lo que no le cabe en la cabeza que el gobierno realmente quiera que se frene la propagación. Le parece indignante que se pida que los ciudadanos se queden en casa, conllevando que mucha gente pierda su empleo, y que ayer mismo siguiesen entrando vuelos procedentes de otros países a nuestro país y pudiendo desplazarse entre comunidades autónomas.
Señala que no está en contra de la cuarentena, es más ella misma se mostraba saca leches en mano y con ‘ Netflix’ junto su bebé pasando el tercer día de aislamiento. Pero considera que las decisiones se están tomando muy tarde y que de nada sirve que cierren las vías si siguen entrando vuelos. “Con solo estar encerrados en casa mientras otros entran no se van a parar” ha recalcado.
También se siente decepcionada con la información que se está dando en los informativos y en televisión, insuficiente y engañosa. “De lo que dicen a lo que es la misa la mitad” ha exclamado enfadada. Aun así sigue pidiendo la colaboración ciudadana, algo que considera necesario y lo mejor para frenar el avance.
Ha querido agradecer a todo el personal sanitario que está doblando turnos, sin dormir para atender y curar a todos los pacientes. También a las personas expuestas de cara al público en supermercados y pequeñas tiendas para que el resto de ciudadanos podamos tener lo necesario para vivir, y a las personas que trabajan en las fábricas y hacen posible que todos los productos lleguen. Finalmente ha pedido un aplauso para la policía que vela por nuestra seguridad exponiéndose en las calles a contagiarse y para los ciudadanos por la colaboración.
Finalmente, ha concluido que en España no estamos haciendo las cosas bien pero que si se estuvieran haciendo bien no hablaríamos de este país. Unas palabras que dejan ver hasta donde llega el enfado de Alma Cortés.
