Katie Holmes es una de las actrices que ha hecho de su estilo una de sus máximas señas de identidad. La estadounidense entró en nuestras allá por 1998, gracias a su papel de Joey Potter en la serie dramática 'Dawson's Creek'. Nostalgia a un lado, no hay semana que las principales agencias de fotografías no lancen un look de Holmes en las calles de Nueva York.
Pese a que la carrera de la actriz parece no estar en su mejor momento, su último estreno fue 'Rare Objects' el pasado año, Katie Holmes genera mucha expectación y eso es bueno. Hace apenas unas horas que ha salido publicado un nuevo estilismo de la estadounidense, una combinación de básicos de armario que nunca pasan de moda sencillamente estelar que todas las oficinistas del país, tengan 30 o 60 años, pueden emular durante los meses de septiembre y octubre.
Con una camisa negra de oversize de lino o ramia, un pantalón de pinza beige y un bolso de color camel, la actriz construye una base magnífica en la que las bailarinas destacan por encima de todo. Katie sabe que los zapatos planos son los reyes de la temporada y no se queda con un modelo cualquier. De hecho, pisa las calles de Manhattan con un par de bailarinas de Miu Miu, una de las marcas que tiene el poder de convertir sus piezas más icónicas en viral.
Valoradas en 890 euros y confeccionadas en mezcla de napa y piel de becerro, estas bailarinas reúnen lo mejor de lo atemporal y lo trendy. Sobre una clásica silueta de bailarina de toda la vida, la firma italiana añade tiras con hebillas y cintas extraíbles para añadir un toque rompedor, aunque no excesivamente dramático, a un calzado que podemos defender 24/7 durante todo el otoño.
Para todas aquellas a las que le falta inspiración para crear looks de oficina cómodos, prácticos y chic a la vez, esta idea de Holmes reúne todos los ingredientes del éxito. Además, tenemos la opción de apostar por las mismas prendas y accesorios, pero en otros tonos. Por ejemplo, podemos cambiar la camisa negra por una blanca, el pantalón beige por uno gris carbón y el bolso camel por uno granate. Eso sí, las bailarinas negras son intocables.
