Tras recibir una cálida acogida en Italia por su papel en la aclamada serie Violeta como el mar, Can Yaman se ha tomado un merecido respiro en Estambul, rodeado del afecto de su círculo más íntimo.
La estancia del célebre intérprete de Sandokan en la metrópolis turca no ha pasado inadvertida y ha suscitado comentarios de todo tipo, especialmente de fotógrafos especializados en capturar la vida de las celebridades, quienes han notado al actor esquivo, pues se ha mantenido reservado ante sus solicitudes de interacción en momentos de ocio y encuentros familiares.
Birsen Altuntas, reputada periodista, apunta que Yaman ha expresado su descontento frente a la insistencia de los paparazzis. Él subraya que, pese a su habitual cortesía y profesionalismo, anhela momentos de tranquilidad, lejos del frenesí mediático que a veces conlleva su profesión.
Sin embargo, durante su visita anterior a Italia, Can mostró su faceta más accesible, compartiendo instantes con admiradores provenientes de diversas partes del globo, llegando a maravillarse ante la petición de autógrafos por parte de fans japoneses, lo cual no es de extrañar, considerando que, en Japón, Violeta como el mar también ha cosechado un notable éxito.
Can Yaman explota
Recientemente, el galán turco ha decidido arrojar luz sobre los recientes malentendidos con la prensa en Instagram, compartiendo unas palabras que, entre líneas, revelan mucho más: «Mis guardaespaldas y yo en nuestro tranquilo viaje por Estambul. Como ya saben, Can Yaman es tan...», dejaba entrever con ironía, refiriéndose a sus acompañantes, que no eran otros que familiares queridos.
Con un tono claramente molesto, el protagonista de aclamadas series expresaba: «Oye, ¿no habíais dejado de grabarme y me habíais olvidado? ¿No decíais que yo era solo una estrella de Italia? ¿De dónde habéis salido otra vez? Ah, pensábamos que ya no nos iban a filmar y nos dábamos el gustazo de pasear tranquilos de vez en cuando. Ya os lo digo, de ahora en adelante, no voy a hablar más del tema», manifestaba Yaman, visiblemente contrariado.
El actor continuaba enfatizando su deseo de privacidad: «Yo no provoco ningún escándalo, sois vosotros los que molestáis y montáis el show. Yo estoy de lo más a gusto y tranquilo con mi familia. Pensáis que si no se paran a hablar con vosotros es porque os están empujando o ignorando, pero nada que ver. Simplemente, me robáis la paz. Prefiero no hablar y no lo veo necesario para nada. Aquí no hay ni drama ni escándalo. Con permiso, seguid con vuestro circo... Que os divirtáis», concluía, dejando claro que su intención nunca ha sido tratar mal a los medios.
Una comida especial en familia
Can Yaman es ese tipo de persona que se deleita en las pequeñas alegrías de la vida, como una buena charla, una deliciosa comida o un paseo por la histórica orilla del Bósforo.
En su reciente escapada a Estambul, el querido actor se dio el gusto de saborear la gastronomía local con su familia en el renombrado restaurante Cabbar, un rincón mágico que exige reserva previa y cuyo menú es un homenaje al paladar con su variedad de delicias turcas. Además, aunque pueda sorprender, la carta incluye propuestas para todos los bolsillos.
De paseo con los suyos
Después de un banquete memorable, Can disfrutó de la belleza del Bósforo acompañado de la familia materna. A pesar de ser hijo único, cuenta con el apoyo incondicional de tíos y primos que respaldan su carrera. La unión familiar es un pilar para el galán de Pájaro soñador, y así lo reflejó al compartir en Instagram un cálido álbum familiar, donde compartía abrazos con todos.
Gülsem Can, la madre de Can, no perdió la oportunidad de sumarse a la ola de cariño con una tierna foto en sus redes, etiquetándolo como "mi precioso", junto a un emotivo emoticono de corazón. Can, siempre conectado con sus seguidores, no tardó en reaccionar a la publicación de su madre, retransmitiéndola con el añadido de un afectuoso "mamá" y un corazón. En poco tiempo, la publicación de Gülsem ha recibido una lluvia de 'me gusta', sumando casi 30.000.
La relación entre Can y su madre es un ejemplo de fortaleza y amor puro, un lazo que se ha fortalecido aún más tras el divorcio de Gülsem y el padre de Can, Güven Yaman. En noviembre de 2023, con motivo del 34.º cumpleaños de Can, Gülsem le dedicó unas palabras conmovedoras en sus redes: «El niño que dio vida a mi vida... Mi hermoso corazón... Mi niño precioso, que tu vida esté llena de amor y alegría. Feliz cumpleaños».
