La controversia en torno a "Mi reno de peluche" continúa, ahora con la voz de la mujer señalada como acosadora. En una entrevista con la verdadera protagonista de la historia, cuya identidad se mantiene en el anonimato, la mujer ofrece su versión de los hechos, contrarrestando la narrativa presentada en la serie de Netflix creada por Richard Gadd.

La mujer, cuya identidad permanece oculta, expresa su indignación ante lo que considera una manipulación de la verdad por parte de Gadd. Acusa al creador y protagonista de utilizar la serie como un medio para intimidarla y obtener fama y beneficio económico a su costa.
"Ahora está usando 'Mi reno de peluche' para acosarme. Soy la víctima. Ha escrito una maldita serie sobre mí", declara la entrevistada, revelando además haber sido objeto de amenazas y abusos en línea por parte de seguidores de Gadd.

La entrevistada también desmiente ciertos aspectos de la trama, afirmando que nunca poseyó un reno de peluche ni mantuvo conversaciones con Gadd sobre juguetes de su infancia. Además, niega rotundamente haber acosado al comediante, destacando que él ha exagerado la situación para beneficiarse personalmente.

En relación con el presunto acoso, la mujer recalca que nunca ha perseguido a Gadd y que él mismo busca constantemente protagonismo. "
Richard Gadd tiene el síndrome del personaje principal. "Él siempre cree que es el centro de atención", comenta la entrevistada, subrayando que ella no ha utilizado su posición mediática para atacarlo como él lo ha hecho.

La entrevista también arroja luz sobre el encuentro inicial entre Gadd y la mujer en el pub londinense Hawley Arms hace aproximadamente una década. Según la versión de la entrevistada, Gadd habría mostrado interés en ella de manera inapropiada, utilizando supuestos piropos y gestos que ella interpreta como insinuaciones sexuales.

Ante estas acusaciones, la mujer está considerando tomar acciones legales contra Gadd, buscando así proteger su integridad y reputación. "Si quisiera que yo fuera anónima de verdad, podría haberlo hecho. Gadd debería dejarme en paz", concluye la entrevistada, dejando entrever las consecuencias legales que podrían derivarse de este conflicto.