Ya ha llegado la época donde, año tras año, hay un producto de la sección de belleza de Mercadona que empieza a venderse como churros: su leche hidratante bronceadora. Desde que la lanzaran al mercado, su viralidad no ha hecho más que crecer año tras año al llegar la primavera y el buen tiempo. Muchas han encontrado en ella una alternativa más gradual y modulable a los clásicos autobronceadores corporales, también mucho fácil de aplicar.
Y es que al tratarse de una leche hidratante bronceadora, lo que suele hacer todo el mundo es directamente cambiarla por su crema hidratante de uso habitual, utilizando esta a diario. El problema del que muchas se quejan es que el resultado queda a parches, especialmente en las zonas de articulaciones como las rodillas o los codos, así como las manos o los pies.

Y claro, nadie quiere un bronceado a parches. Pues bien, hoy vamos a daros tres consejos para evitar que esto pase y conseguir que el moreno que conseguimos con esta leche bronceadora sea uniforme. Atenta:
Consejos para que la leche bronceadora de Mercadona nos deje un bronceado uniforme
Lavarnos bien las manos con jabón cuando terminemos
Al contrario que con los autobronceadores tradicionales, las leches bronceadoras no se aplican con ningún tipo de manopla especial sino con nuestra propia mano. Por lo que es importantísimo que cuando terminemos de aplicárnosla nos lavemos las manos con agua y jabón a conciencia. De lo contrario se nos quedarán mucho más oscuras, creando además parches en las zonas entre los dedos.

Ser constantes en la aplicación
Aunque es un bronceado gradual que no requiere de una aplicación diaria siempre, porque llegaría un punto en el que se saturaría la piel demasiado y el color no nos gustaría, sí es importante ser constantes. Es decir, no echárnosla solamente hasta que nos guste lo morenas que estamos y aparcarla en el baño de nuevo, sino seguir aplicándola de manera progresiva, espaciando los usos las semanas siguientes a conseguir nuestro tono deseado para mantenerlo y evitar que se formen parches.
Exfoliar bien la piel cuando dejemos de utilizarla
Si por X o por Y hemos decidido que no queremos utilizarla más, debemos exfoliar bien la piel los días posteriores para evitar que salgan parches cuando el producto se vaya yendo. Es una forma de "eliminarlo" más rápido y uniformemente, que nos ahorrará el tener que estar varios días con parches en diferentes zonas del cuerpo.
